El precandidato presidencial republicano Mitt Romney que afianzó su condición de favorito luego de su triunfo en Florida, se encamina hacia una nueva victoria en la contienda interna de su partido en Nevada, donde mañana se celebran "caucus" o asambleas populares.
Según los sondeos, el ex gobernador de Massachusetts supera a su directo contendiente, Newt Gingrich, por unos 20 puntos en intención de voto.
Los otros dos aspirantes republicanos, Rick Santorum y Ron Paul, figuran siempre en las últimas posiciones, muy alejados de Romney y Gingrich en todas las encuestas.
Romney, millonario mormón, podrá contar con el apoyo de los miembros de la iglesia de Nevada, un estado en el que el 7% de la población es mormona, aunque su influencia es mayor porque participan muy activamente en los procesos electorales.
En 2008 casi una cuarta parte de todos los votantes de las primarias republicanas en Nevada era mormona y unos nueve de cada 10 apoyaron a Romney.
Ayer el ex gobernador de Massachusetts recibió el respaldo del magnate Donald Trump, quien el año pasado barajó la idea de postularse a las presidenciales. Trump tachó a Romney de "duro, listo y agudo".