Dos días alcanzó a estar en toma el Liceo Ríos de Chile, en Penco, Región del Biobío. Hoy en la madrugada ya no había alumnos en el recinto, y cuando el personal del municipio ingresó al establecimiento, descubrieron daños por más de $ 20 millones.

Esto llevó al alcalde Víctor Hugo Figueroa a anunciar la implementación de la medida "rompe-paga", desarrollada originalmente por Santiago. A diferencia de dicho municipio, donde la primera demanda se interpuso contra los apoderados de las integrantes del centro de alumnas del Liceo 7 por incitar la toma, en Penco la PDI hará una investigación y un levantamiento de huellas para dar con los responsables.

"Este tipo de hechos vandálicos no puede quedar en la impunidad y por eso llegaremos hasta las últimas instancias", dijo Figueroa, quien enfatizó que se podría demandar a los autores de los daños.

Ramiro Jiménez era el presidente del centro de alumnos, sin embargo, debido a la toma, se le pidió la renuncia. Según él, se tomaron el colegio "para pedir que se respeten los sellos del liceo: democrático, inclusivo, saludable, ecológico, además se despidió a profesores de manera injustificada", dijo.

La comunidad escolar, por su parte, respaldó la medida del edil. "Me parece súper bien esto del 'rompe-paga', porque alguien tiene que hacerse responsable de los daños. Si un padre autoriza a su hijo para que participe de una toma y después hay daños, hay que responder", dijo Solange Aguayo, apoderada.

Algunos alumnos también estuvieron de acuerdo con la idea y señalaron que había implementos nuevos que fueron destruidos, "por lo que está bien que paguen los papás, para que aprendan. Se llevaron materiales que nosotros usamos", dijo el estudiante de tercero medio Matías Vargas.

El seremi de Educación, Sergio Camus, respaldó la decisión del edil. "Nuestra legislación siempre ha establecido la responsabilidad de los padres por los actos de los menores en los hechos de responsabilidad civil. Es decir, responder económicamente por los daños que puedan causar sus hijos".

Pese a este episodio, a nivel nacional solo nueve colegios están en toma, aunque ocho de ellos son capitalinos.

Hasta ahora la comuna con más colegios ocupados es Santiago. El Instituto Nacional, Liceo Confederación Suiza, Aplicación y Amunátegui están siendo ocupados por sus alumnos. En Maipú también figura un recinto ocupado: el Liceo Santiago Bueras.

En tanto, en Providencia, el Liceo 7, Arturo Alessandri y el Tajamar están en toma. Allí la dirección de educación decidió no desalojar los colegios, como en Santiago, y han preferido dialogar con los estudiantes.

De acuerdo a José Palma, director de educación, el municipio ha adoptado una política de diálogo, ya que "creemos que cuando las soluciones se logran por el diálogo, son permanentes".

En esa línea, Palma señaló que ya se presentó una propuesta a los tres colegios ocupados y que se ha visto una buena disposición por parte de ellos. Según Palma, ahora solo esperan que los dirigentes con quienes se ha conversado bajen las respuestas al resto de los alumnos. "No hay razón que haga pensar que las propuestas puedan ser rechazadas", agregó Palma.

En tanto, en la comuna de San Fernando, de los 21 colegios municipales, 20 están en paro y uno en toma. En este caso, los alumnos y profesores se están manifestando por la situación que están viviendo los profesores, impagos en sus sueldos .

I. Nacional sigue en toma

Temprano en la mañana eran pocos los alumnos que hacían fila para poder votar en el proceso para ratificar o bajar la toma en el Instituto Nacional. Pero pasado el mediodía comenzó a llegar el grueso de los estudiantes, y en el caso de los menores de séptimo, muchos llegaban con sus apoderados.

Este fue el segundo proceso de votación que vivió el colegio esta semana, luego de que los comicios del martes, cuando se impuso bajar la toma, fueran impugnados por el Tribunal de Alumnos del colegio por irregularidades. A la salida del colegio, un gran número de padres esperaba a sus hijos. La mayoría esperaba que se bajara la toma, aunque también quieren que los alumnos se sigan manifestando, pero no a través de tomas.

Loreto Guajardo es apoderada del séptimo M y señaló que "estamos de acuerdo con las cosas que ellos pelean, el tema es la forma. Los apoderados, profesores y ellos nos podemos unir y juntos hacer algo, porque algo se tiene que hacer por la infraestructura del colegio".  Esta noche, la opción de continuar en toma ganó con 1.604 votos contra 1.049.