Después de la victoria de Inglaterra sobre Escocia, por 3-0, el plantel del cuadro ganador quedó en libertad de acción, una medida que fue bien recibida por los jugadores. Sin embargo, el capitán Wayne Rooney decidió permanecer en el hotel de concentración y divertirse a su manera.
De acuerdo al periódico británico The Sun, el delantero del Manchester United se coló en una boda privada que se estaba desarrollando en el hotel. Así, fue visto bebiendo vino y cerveza en el bar del hotel junto a otros miembros de la Federación Inglesa.
Conforme transcurría la noche, Rooney se mostraba cada vez más amable, aunque también su hablar comenzó a adquirir una forma extraña y su rostro se puso algo más rojizo de lo normal. "Wayne estaba en el bar con algunos miembros de la FA, bebiendo cerveza y vino. Parecía que quisiera que se le reconociera porque llevaba la camiseta de la selección. Al principio pensamos que era un doble. Parece mayor en persona. Tenía los ojos y los labios rojos. A medianoche le pidieron que saludara a los invitados de la boda, posó para las fotos, habló con la novia y siguió bebiendo. No tenía muy buen aspecto para cuando se marchó, a eso de la una de la mañana", relató un testigo.
El atacante, que ha recibido muchas críticas por su actual momento futbolístico, no estará en el amistoso frente a España, debido a molestias en una rodilla.