Recordado por su música, Sandro incursionó no solo en el rock and roll, pop y balada romántica, también realizó 16 películas como actor y director. Con 52 álbumes originales, Sandro fue un cantautor que imitando la vestimenta y bailes de Elvis Presley se abrió paso en la música y hoy sigue siendo recordado a 7 años de su muerte el 4 de enero de 2010.
Roberto Sánchez, más conocido como Sandro dejó un legado musical y cinematográfico que traspasó la cordillera e influenció todo el continente latinoamericano. Sus grandes éxitos como Rosa Rosa, Dame fuego, Quiero llenarme de ti, Tengo, Porque yo te amo y Una muchacha y una guitarra, eran escuchadas por la juventud de la década de los 70 que paulatinamente recibía los ritmos de la onda disco provenientes de Estados Unidos.
La canción Rosa Rosa, perteneciente a su disco de 1969 Sandro de América, vendió 2 millones de discos. Mientras que su éxito Tengo fue considerado como la N°15 entre las 100 mejores canciones del rock argentino según la revista Rolling Stone y MTV.
Una de las presentaciones más memorables del "gitano" fue el concierto que desató la locura por la balada romántica en América. A fines de 1967, Sandro ganó el Festival Buenos Aires de la Canción con su tema Quiero llenarme de ti. Chile no estuvo exento del furor que causaba el cantante argentino. En febrero de 1968, el gitano se presentó en el Festival de Viña del Mar, donde nuevamente ganó, repitiendo así el éxito del festival bonaerense. Viña del Mar fue el gran paso internacional de su carrera.
El 11 de abril de 1970 el músico realizó toda una hazaña para su carrera y la música latina con su show en el salón Felt Forum del Madison Square Garden. Sandro fue el primer latinoamericano en cantar no solo en uno, sino que en dos recitales en el recinto. En 1993 realizó una nueva proeza musical al presentarse 18 veces en el teatro Gran Rex de Buenos Aires con su concierto llamado Treinta años de magia, superando así el récord de 13 presentaciones que ostentaba la banda de rock latino Soda Stereo.
El artista también destacó en el ámbito cinematográfico. Su primera participación en el cine fue en la película Convención de Vagabundos de 1965 en un rol secundario. Luego trabajaría en 15 producciones en las que fue protagonista o incluso director. De estos trabajos destacan Gitano (1970), Operación Rosa Rosa (1974) y la inédita Muchas gracias maestro (1993).
La carrera de Sandro contó con más de un galardón reconociendo sus dotes musicales y actorales. En la década de los 70 aparece el trofeo Meridiano de Oro por votación popular venezolana, el cual fue entregado al intérprete de Rosa Rosa todas las ediciones desde 1970 a 1975 y luego en 1978. También recibió en Estados Unidos el premio Grand Ball al cantante del año en 1972 con las llaves de la ciudad de Miami.
En 1990, el programa musical de televisión que él mismo conducía llamado Querido Sandro, ganó el premio Martín Fierro y en 1999, le otorgaron el Premio Carlos Gardel de Oro por su trayectoria musical. Otro reconocimiento a su carrera fue el Grammy Latino que recibió el año 2005.
