El piloto alemán de Fórmula Uno Nico Rosberg (Mercedes), líder del Mundial y ganador hoy del Gran Premio de Austria, reconoció tras la carrera que los 29 puntos que le lleva al segundo clasificado, su compañero británico Lewis Hamilton, son "una buena ventaja" pero es todavía "muy pronto".

"29 puntos son una buena ventaja pero es todavía muy pronto. Quiero concentrarme en cada fin de semana y hacer lo mejor en cada carrera, disfrutando del momento con el coche que tenemos", dijo Rosberg en la rueda de prensa posterior a su victoria en el Red Bull Ring de Spielberg.

El piloto alemán reconoció que "no fue una carrera fácil", así como que tuvo el coche "al límite" en varias partes de la carrera.

"Es genial hacer un doblete en Austria, y ha sido bonito volver. Este país merecía tener de nuevo una carrera, los aficionados son increíbles y ha habido una gran atmósfera", agradeció el ganador del GP de Austria, que no se disputaba desde 2003.

Rosberg reconoció que la estrategia, especialmente las paradas, fue una de las claves para batir al equipo Williams, que comenzaba con sus dos pilotos en primera línea de salida, el brasileño Felipe Massa y el finlandés Valtteri Bottas.

"Sabía que podía adelantar a Valtteri en la salida y lo hice, pero él iba rápido en las rectas y me adelantó. Pero yo sabía que, aún siendo tercero tras la salida, tendría oportunidades porque nosotros tenemos más ritmo y menos degradación en los neumáticos que Williams, por lo que pudimos ser agresivos en las paradas y eso verdaderamente funcionó, de manera que estoy muy feliz", dijo.

El piloto alemán y su compañero Hamilton tuvieron una bonita lucha final en la que el británico intentaba acercarse a su compañero para amenazar su primer puesto.

"Sabía que podía mantener la distancia, aunque en la última vuelta mis ruedas estaban bastante degradadas, pero cuando pasamos las curvas más cerradas sabía que todo iría bien porque estábamos menos apretados que otras veces", relató el líder del Mundial.