La fuerte alza en las tasas de interés que realizó el lunes el banco central ruso no lograba aliviar la presión sobre el rublo, dado que el mercado seguía poniendo a prueba la resolución del organismo para defender a la moneda y presionaba a la debilitada economía rusa.

El rublo se debilitaba sobre las 73 unidades por dólar. Contra el euro, la moneda caía a 82,67 rublos, afectada por la baja en los precios del petróleo, las sanciones impuestas por Occidente por la intervención de Moscú en la crisis en Ucrania y por el creciente pánico de los mercados.

El banco central de Rusia decidió elevar su tasa de interés referencial a un 17% desde un 10,5%.

La moneda inició la sesión con un alza de un 9% contra el dólar luego del anuncio del banco central, pero rápidamente revirtió sus avance y cayó a nuevos mínimos.

Este año el rublo se ha depreciado un 50% contra el dólar.

Analistas dijeron que el martes podría ser un día clave para el rublo. El lunes la moneda se hundió cerca de un 10% su peor caída desde la crisis financiera del país, en 1998.

El presidente ruso, Vladimir Putin, responsabiliza a los especuladores y a Occidente por la caída en los precios del petróleo y por la depreciación del rublo.

La debilidad de la moneda es una fuerte prueba para Putin, cuya popularidad se apoya en ofrecer estabilidad y prosperidad además de su línea dura en la crisis ucraniana.