La selección neozelandesa de rugby y los British and Irish Lions empataron 15-15 este sábado en Auckland en su tercer y último encuentro amistoso, terminando la serie sin vencedor, tras haber ganado antes cada uno un partido.
Es la segunda vez en la historia que los Leones terminan una serie de test-matches sin ganador, después de la de 1955, en Sudáfrica.
Los actuales bicampeones mundiales sumaron con tries de Ngani Laumape y Jordie Barrett, más un penal y una conversión del hermano de éste, Beauden Barrett. Para los visitantes, hubo sólo penales: cuatro de Owen Farrell y uno del wing Elliot Daly.
El técnico de los B&I Lions, el neozelandés Warren Gatland, se mostró más que satisfecho. "Es meritorio formar un equipo y traerlo a enfrentar al mejor equipo del mundo, y particularmente en Eden Park (el estadio en Auckland), donde ellos tienen un récord fenomenal". Luego, matizó: "Creo que, cuando despertemos mañana y lo pensemos, llegaremos a la conclusión de que no estuvo nada de mal".
Los Lions están integrados por los mejores jugadores de Escocia, Gales, Inglaterra e Irlanda.