Moscú se ofreció hoy como mediador entre el gobierno y la oposición más moderada de siria, según informó hoy el viceministro de Exteriores, Mijail Bogdanov, en la capital rusa tras un encuentro con representantes del Partido Comunista sirio.

Con ello, es la primera vez que Rusia mantiene una reunión oficial con críticos del Presidente Bashar al Assad.

Rusia busca reunirse también pronto con representantes del Consejo Nacional Sirio, congregado a partir de opositores al régimen y comités ciudadanos.

Los comunistas de Damasco agradecieron a Rusia su veto a la última resolución en el Consejo de Seguridad sobre el país que condenaba la violencia, al rechazar cualquier injerencia extranjera, dijo un vocero a la agencia de noticias Interfax.

En lugar de ello, es el pueblo sirio quien debe decidir. Los comunistas exigen como prioridad la dimisión de Assad, pero critican el consejo opositor formado en Estambul. "Esa oposición sólo llama a una injerencia de Occidente", aseguran. Al contrario, los comunistas se consideran patriotas.