Rusia y China quieren incrementar su cooperación militar, que consideraron un factor decisivo para la seguridad en el mundo, anunció hoy el presidente ruso, Vladimir Putin, tras un encuentro con su homólogo chino, Xi Jinping.
Hay buenas perspectivas para la construcción conjunta de un avión y de un helicóptero, añadió Putin al inicio de su visita de dos días en Shanghai, citado por la agencia Itar-Tass.
Coincidiendo con la visita comienzan varios días de maniobras de barcos militares rusos y chinos en el mar de la China Oriental. Beijing se enfrenta con Tokio en esa zona desde hace años por una serie de islas deshabitadas.
Un punto central de la visita de Putin a China es la firma de un número récord de 43 tratados. Hoy se suscribieron documentos sobre seguridad global, cooperación bilateral, energía e infraestructuras.
China y Rusia están preocupadas por los efectos de la ruptura de la seguridad informática "sobre la soberanía estatal y la inviolabilidad de la vida privada", se indicó en un comunicado, en directa alusión al espionaje estadounidense.
En el texto, citado por la agencia Itar-tass, los dos países llamaron a todas las naciones a "abandonar el lenguaje de las sanciones unilaterales (...) y dejar de apoyar actividades encaminadas a cambiar el sistema constitucional de otros países".
También expresaron su "grave preocupación" por la crisis en Ucrania y llamaron a todas las partes a reducir la tensión y llevar a cabo "amplias conversaciones a nivel nacional".
Los dos países llevan tiempo sin poder cerrar un acuerdo sobre venta de gas que ahora parece estar a punto de concretarse, según dio a entender Putin el lunes.
Rusia busca nuevos mercados tras su enfrentamiento con Occidente por la crisis en Ucrania, y China es uno de ellos.
El diálogo sobre el gas está muy avanzado y China podría firmar "en cualquier momento", señaló Dmitri Peskov, portavoz de Putin. El principal escollo es el precio, el mismo problema que ya impidió el año pasado que se sellara el acuerdo.
La visita de Putin está marcada por el conflicto en Ucrania y el enfrentamiento con Estados Unidos y la Unión Europea (UE). El encuentro entre el presidente y Xi en Shanghai es considerado también un gesto hacia Occidente en el sentido de que Moscú busca nuevos aliados.
Otros de los acuerdos firmados hoy contemplan la construcción de un puente transnacional sobre el río Amur desde el noreste de China a Siberia -a un coste de 400 millones de dólares-, así como una refinería de petróleo en la ciudad china de Tianjin y un proyecto de gas natural licuado.
Tras la inauguración de las maniobras marítimas, Putin se reunirá hoy también con el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, que se encuentra en la metrópolis china. Ambos participan en una cumbre de seguridad asiática.