"Acababa de poner el ataúd en el coche fúnebre y estaba viendo cómo éste se alejaba cuando se me acerca una hermosa mujer rubia", explica Ryan O'Neal, que no dudó en proponerle tomar un trago y preguntarle si tenía auto. El actor aseguró en la entrevista, que estará incluida en el número de septiembre de Vanity Fair, que "sólo estaba tratando de ser divertido con una sueca desconocida".
"Y resultó que era mi hija. ¡Es tan lamentable!", añadió.
Tatum O'Neal, de 45 años, que fue detenida el año pasado en Nueva York por comprar crack y cocaína en la calle, explicó que el incidente es un claro reflejo de cómo es la relación entre ambos.
"En resumidas cuentas, así es nuestra relación. Hacemos con ella lo que queremos. Han pasado unos años desde que no nos vemos y él siempre ha sido un mujeriego, un vividor", explicó la actriz, quien en 1974 se convirtió en la persona más joven en ganar un Oscar a la mejor actriz de reparto por su trabajo en Luna de Papel.
O'Neal es padre cuatro hijos: Tatum O'Neal y Griffin O'Neal (con Joanna Moore), Patrick O'Neal (con Leigh Taylor Young) y Redmond O'Neal (con Fawcett). En la entrevista, reconoce también que no le importaría tener algún hijo menos: "Creo que yo no tendría que haber sido padre, no hay más que echar un vistazo a lo que he conseguido: o están en la cárcel, o deberían estarlo".
Redmond, que cumple condena desde abril en una prisión californiana por varios delitos relacionados con las drogas, es el último con el que mantiene relación, ya que con el resto no está en contacto. "Y nunca he sido más feliz", añade.
A la propia Tatum le llama "puta" en la entrevista cuando hace alusión al libro que ésta escribió en el que describía, entre otros detalles de la familia, el consumo de drogas de sus padres y los abusos físicos y psicológicos de su padre hacia sus hijos.