Farrah Fawcett, fallecida el mes pasado, nunca se rindió en su batalla contra el cáncer y cuando los médicos consideraron que le restaban dos horas de vida, la protagonista de Los Ángeles de Charlie siguió luchando durante dos días más reveló hoy su pareja, el también actor Ryan O'Neal.

O'Neal dijo hoy en el programa Today, de la cadena NBC, que los últimos momentos de vida de la popular intérprete fueron "horribles".

"No quería irse", dijo el actor de 68 años en su primera entrevista desde la muerte de Fawcett, el pasado 25 de junio. "Ella simplemente nos miraba con una leve sonrisa. Entonces todas las máquinas se apagaron y después de unas 16 horas, se había ido", señaló.

Fawcett sufría desde 2006 un cáncer anal que se había extendido al hígado.

"Nunca cerró los ojos", comentó O'Neal. "Permanecieron abiertos durante las últimas tres semanas de su vida, mirándonos", añadió.

"Creo que estuvo aguantando. Pienso que no quería irse, tenía cosas por acabar, por conseguir", continuó el actor.

O'Neal aseguró que pretende contestar a todos los correos electrónicos de los fans de su pareja y que el coraje con el que afrontó Fawcett su enfermedad se ha convertido en su nueva inspiración.

"Soy la nueva roca, y estoy usando lo que me enseñó para sobrevivir, seguir adelante, y cuidar de mi hijo Redmond", declaró el actor. "Mando esos correos a mi hijo para que pueda ver lo que sentía la gente por su madre", explicó.

Redmond O'Neal, de 24 años, sigue preso por violación de libertad vigilada en un caso de drogas.