"Es un hombre de recta conciencia moral", así describió el sacerdote Raúl Hasbún al ex director de la CNI, Odlanier Mena, quien el pasado Sábado se suicidó antes de ser trasladado al Penal Punta Peuco.
El sacerdote, quien presidió la misa de responso, aseguró que Mena era un hombre justo e íntegro, e insistió en su inocencia.
"Odlanier Mena ha estado siempre convencido de su total inocencia, y yo le creo", dijo Hasbún y agregó que "hubo personas llamadas a impartir justicia y no le creyeron".
El sacerdote manifestó en la ceremonia que, "frente a toda esta sensación de injusticia, el corazón de Odlanier Mena sintió toda la pena, toda la angustia".
"Ahora le toca presentarse ante el tribunal de la misericordia, ante un justo juez que no se equivoca", señaló Hasbún.
Cerca de una hora duró la misa que contó con la participación de al menos 400 personas, entre ellos el ex alcalde Cristián Labbé y Lucía Pinochet Hiriart, y los discursos de familiares y amigos del ex CNI.
La ceremonia se realizaó bajo estrictas medidas de seguridad. Carabineros instaló vallas papales para impedir el ingreso de la prensa a la parroquia.
