La belga Kim Clijsters, que regresó al tenis hace año y medio, dejó en evidencia a la rusa Dinara Safina, que en 2009 llegó a ser número uno del mundo, a la que liquidó por un doble 6-0 en cuarenta minutos.
Así, Safina quedó fuera del Abierto de Australia en la primera ronda, igual que la serbia Ana Ivanovic, que cayó contra la rusa Ekaterina Makarova (3-6, 6-4 y 10-8).
Clijsters, finalista en 2004 en el Melbourne Park, arrolló a su adversaria, lejos del momento que le situó en la cima del ránking WTA. Un puesto deslucido por la carencia de actuaciones notables en los grandes torneos.
Safina, finalista en Australia en 2009 y que el pasado año no pudo sobrepasar los octavos de final, que abandonó lesionada, está al margen de las exigencias y del nivel de antaño. Salió mal parada ante una rival a la que le sobra ambición y energía y que desde su vuelta ha ganado seis torneos, entre ellos dos Abiertos de Estados Unidos.
Clijsters jugará en segunda ronda con la española Carla Suárez, que tumbó a la estadounidense Christina McHale (4-6, 6-3 y 6-4).