Gestiones ante el Ministerio de Hacienda para inyectar recursos a la deuda hospitalaria, que en octubre llegó a $ 255 mil millones, están realizando las autoridades de Salud.

Así lo confirmó la directora de Fonasa, Jeanette Vega, quien sostuvo que están en curso las tratativas para conseguir recursos frescos que amorticen el creciente déficit de la red asistencial: "Estamos conversando con Hacienda para ver si hay un ajuste final antes de que termine el año".

De concretarse, la remesa se sumaría a la que ya hizo Hacienda en abril pasado, por $ 131 mil millones, y al anticipo de presupuesto corriente de la cartera de $ 100 mil millones, que ocurrió en octubre.

"La deuda sigue en torno a los $ 250 mil millones. Hemos trabajado fuertemente en la contención de la misma y sabemos que un gran porcentaje se debe a un tema estructural", agregó la ministra de Salud, Carmen Castillo.

Se trata de un déficit más cercano a los $ 300 mil millones, según la Asociación de Proveedores de la Industria de la Salud (Apis), cuyo presidente, Christian Hänel, afirma que ha tenido efectos graves para el sector: durante noviembre, al menos cuatro hospitales (Antofagasta, Quillota, Carlos van Buren y Gustavo Fricke) incumplieran los compromisos pactados con empresas.

"El no pago es una cadena y produce escasez de recursos en las empresas, que, a su vez, no pueden proveer tan fácilmente a sus clientes", dijo Hänel

Falta de insumos

El déficit de recursos e incumplimiento de los pagos a proveedores ya está generando efectos en la atención de pacientes. Así ocurre en el Hospital San Martín de Quillota, en la V Región, donde los médicos denunciaron falta de fármacos e insumos, entre otros

De acuerdo a los profesionales, entre el 13 y el 19 de diciembre se suspendieron 17 cirugías en el recinto. Doce de éstas, de cataratas, no se realizaron por falta de antibióticos posoperatorios, otras dos porque no había medias antitrombóticas y tres porque se acabó la formalina. En el caso de las garantías Auge/GES, el gremio denunció que poco más de 300 casos estaban incumplidos por falta de lentes y audífonos, cuyo stock está agotado por no pago a los proveedores. Además, señalaron que ayer, el 14% de las recetas emitidas por la farmacia del hospital no pudieron despacharse por la carencia de medicamentos.

Angela Urtubia, vocera de los médicos del Hospital de Quillota, dijo que "esto es una situación progresiva, pero el nivel de desabastecimiento es nunca antes visto. Hemos suspendido actividades importantes. Cosas tan básicas como hojas de bisturí o vendas han estado ausentes en pabellón. El lunes no hicimos tres cirugías de cáncer de mamas y colon. Hay riesgo de muerte de nuestros pacientes", alertó.

El lunes pasado, el recinto recibió $ 225 millones desde el Servicio de Salud Viña del Mar -Quillota, sin embargo, Urtubia asegura que "los dineros aportados van parchando, pero no nos asegura que esto no va a ocurrir mañana".

El director del Hospital de Quillota, Ramón Galleguillos, dijo que "a veces es el proveedor el que no tiene stock, nosotros les damos prioridad a proveedores pequeños, y agregó que "es cierto que nos pilló la máquina, pero llamo a la calma a los funcionarios".

Para el presidente del Colegio Médico, Enrique Paris, la situación es "muy grave. Si el médico no cuenta con los elementos técnicos e insumos no puede trabajar bien y el perjudicado es el paciente".

Hänel añade que "la situación de Quillota es la punta del iceberg. Es el comienzo de lo que habíamos anticipado. Hay muchos hospitales muy endeudados, ahí cada proveedor verá si puede seguir proveyendo de insumos", dijo.

Por su parte, la ministra Castillo dijo esperar que "esto no sea algo generalizado, obviamente son temas para preocuparse".