Un 30% aumentarán los pacientes que recibirán tratamiento contra el VIH-Sida en el país, durante el próximo año. Esto, debido a un cambio en los criterios del Ministerio de Salud (Minsal) y a un crecimiento de la población infectada.
De acuerdo a Minsal, en Chile existen 22.412 personas que viven con la enfermedad. De ese total, 18.523 pacientes están bajo tratamiento farmacológico y médico en la red pública, mientras que el resto, por la fase de la patología, no lo requiere. A estos se suman 246 niños, de los cuales 214 están utilizando medicamentos.
Gisela Alarcón, jefa de la División de Redes de Salud, señaló que el futuro crecimiento de usuarios responde a que este año se realizó una modificación de criterio de selección de los pacientes que utilizan algún tipo de droga. "Hubo un cambio de guía clínica en beneficio de los pacientes que tienen VIH-Sida, porque hace que se inicie la terapia en forma más precoz", dijo Alarcón. Hoy, se considera que un paciente debe someterse a control cuando tiene menos de 350 linfocitos en la sangre, mientras que, hasta 2013, eran menos de 200 de linfocitos (células sanguíneas cuya merma revela el avance de la enfermedad).
A esto se suma el aumento de casos de personas infectadas. Según el balance de Epidemiología del Minsal, en el quinquenio 2008-2012, había una tasa de notificación de 61,5 casos a nivel nacional por cada 100 mil personas. En los cinco años posteriores, la cantidad de personas con esta patología fue de 67,4 por 100 mil personas.
El reporte de Salud, además, indica que Arica es la región con la mayor notificación por VIH entre 2009-2013, con 133,2 casos por cada 100 mil personas.
Falta de medicamentos
Carlos Beltrán, vocero de la Corporación Sida Chile, explicó que la planificación de compra de medicamentos para VIH se hizo en forma tardía por parte de la cartera de Salud, lo que generaría que, desde enero y febrero del próximo año -estimó- unas seis mil personas podrían quedar sin productos.
Beltrán agregó que existen cinco tipos de remedios antirretrovirales que tienen un stock crítico que se acabaría en los próximos meses "porque la planificación y compra se debe hacer , al menos cuatro meses antes de que lleguen al país, lo que no se ha hecho por ahora".
Gisela Alarcón, jefa de Redes de Salud, descartó un eventual desabastecimiento y agregó que "la programación se hizo desde mayo y junio para el próximo año, pero escuchamos la preocupación que ha surgido en la población, de los especialistas y los pacientes. Estamos acentuando la fiscalización de compra y licitación de estos fármacos", los que serán distribuidos en los 30 centros especializados que existen en el país.
Consultada la ministra de Salud, Helia Molina, sobre el tema, señaló que "ya licitamos todo el año 2015. Se aumentó la cantidad de personas que recibe tratamiento, porque hubo un cambio de norma".
Según datos de la Central de Abastecimiento (Cenabast) en los últimos cuatro años un 26% de las drogas adquiridas correspondieron a antirretrovirales.