Cerca de las 21 horas de anoche la ex abanderada presidencial del Frente Amplio, Beatriz Sánchez, llegó hasta Plaza Italia con la intención de dar a conocer su postura de cara a la segunda vuelta, tras dos semanas de reflexión post comicios del 19 de noviembre.
"Mi voto es contra Sebastián Piñera y para eso voy a votar por Alejandro Guillier", dijo la periodista, blindada por algunos dirigentes del conglomerado.
A poca distancia la observaba uno de los principales asesores comunicacionales del candidato de la Nueva Mayoría, Luis Conejeros, quien concurrió al lugar luego de que trascendiera la actividad de la ex postulante a La Moneda.
15 minutos antes de su alocución, de hecho, Sánchez se había comunicado telefónicamente con Guillier para contarle de su decisión.
A los líderes del Frente Amplio, en tanto, ya les había advertido la tarde del domingo que -a diferencia de la declaración pública que el conglomerado difundió la semana pasada, en la que se dejó en libertad de acción y se evitó un respaldo directo a Guillier-, ella sí explicitaría su voto por la carta oficialista.
Lo que el domingo nadie sabía, sin embargo, era que el apoyo se iba a materializar ayer. De hecho, algunos sectores del bloque le habían solicitado a Sánchez postegar unos días su anuncio, lo que era el escenario más probable.
La arremetida de Sebastián Piñera acusando "votos marcados" en la primera vuelta terminó, sin embargo, adelantando la puesta en escena de la ex carta presidencial, aseguran en su entorno.
Ella misma, en su mensaje de ayer, aludió a las acusaciones del ex Mandatario.
"Sus declaraciones son inaceptables, lo que hizo fue cruzar un límite respecto de lo que somos y de lo que hemos hecho como país, de lo que es hoy la democracia (...) No se juega con Chile y no todo vale a la hora de una elección presidencial", sentenció Sánchez.
Precisó también que el suyo no era un llamado a votar por Guillier -"no soy dueña de los votos de nadie"- sino que una postura personal y que el candidato de la Nueva Mayoría "tiene que hacer más para conquistar el voto del Frente Amplio, tiene que hacer más para conquistar muchos de los votos que a lo mejor nos favorecieron el pasado 19 de noviembre".
Festejos en oficialismo, aprensiones en el FA
El explícito apoyo de Sánchez a Alejandro Guillier fue festejado en la Nueva Mayoría, sobre todo porque se daba en una jornada en que a Piñera se le había abierto un sorpresivo flanco a partir de su denuncia sobre "votos marcados". El propio senador independiente se apuró en señalar en Twitter: "Beatriz, gracias por tu transparencia, fuerza y valor. Aprecio enormemente tu apoyo y la unidad para construir un Chile más justo".
Al interior del Frente Amplio, sin embargo, la evaluación no fue unánime. En privado, varios dirigentes del Partido Humanista, Izquierda Libertaria, Partido Ecologista Verde (PEV) y de Partido Igualdad no compartieron la decisión de Sánchez de adelantar su respaldo a Guillier, a menos de una semana de la propia puesta en escena del bloque.
En medio de los cuestionamientos internos y externos que recibió la coalición por su postura de cara a la elección del 17 de diciebre, la que fue calificada de "ambigua" y "errática", Sánchez inevitablemente aparecería tomando distancia de lo resuelto por las instancias formales del Frente Amplio, de la que ya se habían descolgado varias de sus figuras, como el alcalde de Valparaíso, Jorge Sharp, el diputado Vlado Mirosevic y Miguel Crispi, quienes han sincerado que votarían por el abanderado oficialista.
"Los dirigentes políticos del Frente, sobre todo su ex candidata presidencial, así como los presidentes de partido, no nos mandamos solos y no podemos darnos gustos personales", advirtió anoche el diputado electo y presidente del PEV, Félix González.
Sebastián Depolo, ex jefe de campaña de Sánchez, desestimó, sin embargo, que la postura de la periodista debilite la posición del bloque. "La decisión del Frente es bien clara, los votos son de la gente, cada uno vota en conciencia. Si Guillier quiere ganar la elección la pelota está en su cancha", dijo.
Desde Chile Vamos, en tanto, donde la semana calificaron la declaración del Frente como una "derrota política" para Guillier, ayer señalaron que era previsible. "No es sorpresa. Simplemente están adelantando la jugada que se habían guardado para última hora. Es mejor que Chile sepa quién es quién: Guillier es desde hoy el candidato del Frente Amplio y de su agenda de extrema izquierda", dijo el presidente de RN, Cristián Monckeberg.
En tanto, el ex candidato presidencial independiente, José Antonio Kast, dijo que el apoyo de Sánchez representaba una "burla" al plebiscito de RD. "Le piden la opinión a su gente y luego la ningunean", dijo.