El vicepresidente segundo y consejero delegado del Banco Santander, Alfredo Sáenz, aseguró hoy que "no existe riesgo" probable de que España vaya a necesitar un rescate económico de la Unión Europea (UE).
En una conferencia pronunciada en Bilbao (norte de España), Sáenz dijo que, tras las últimas medidas de ajuste adoptadas por el Gobierno español, "no estamos en la zona de amplio peligro", como apuntan algunos expertos internacionales "muy catastrofistas" que aún desconfían de la economía española.
El consejero delegado del primer banco español -y uno de los más grandes del mundo- advirtió de que se deberá ejecutar el plan de ajuste diseñado por el Ejecutivo del socialista José Luis Rodríguez Zapatero para salir de la crisis, y subrayó su confianza en la capacidad del Gobierno para sacar al país de la actual situación.
Para lograr ese objetivo, Sáenz aconsejó al Gobierno español "liberalizar todos los mercados que pueda" para favorecer "la sanidad en general de la economía", ya que, a su entender, en España "aún existe demasiada rigidez en muchos mercados".
El banquero hizo esos comentarios un día después de que la agencia de medición de riesgos Moody's amenazara con volver a revisar a la baja la calificación de la deuda soberana española ante las "altas necesidades de refinanciación" de España en 2011.
Después de semanas de fuertes presiones en los mercados sobre España, el Gobierno español adoptó este mes nuevas medidas anticrisis, aprobadas este martes en el Parlamento, y anunció que aprobará la reforma de las pensiones en enero próximo.
Las nuevas medidas prevén rebajas fiscales a las pequeñas y medianas empresas, la subida de impuestos al tabaco, la privatización parcial de la gestión de los aeropuertos y de la sociedad pública de Loterías, así como la desaparición de la ayuda a los desempleados de larga duración.
Estas medidas se unen al plan de austeridad adoptado el pasado mayo, que aprobó la rebaja del salario de los funcionarios y la congelación de las pensiones.