Santiago asoma como el único candidato

Los plazos se acortan y la Presidenta Michelle Bachelet deberá tomar una decisión con respecto a la candidatura de Chile a los Juegos Panamericanos de 2023.

La carta de postulación deberá estar en las oficinas de la Organización Deportiva Panamericana a más tardar el 31 de enero, por lo que el tiempo apremia para un pronunciamiento de parte del gobierno.

Por esta razón, la mandataria recibió el lunes un detallado informe del Ministerio del Deporte en el que se sugiere presentar la candidatura, ya que albergar una cita de tal envergadura permitiría dar un salto de calidad en materia de levantar eventos de esta dimensión.

"Entregamos a la Presidenta Bachelet el informe donde recomendamos la postulación de Chile a la organización de los Panamericanos 2023. El informe que preparamos incluye razones a partir de las cuales la postulación favorece el desarrollo del deporte de alto rendimiento en Chile así como también la ratificación de nuestro país como organizador solvente de grandes eventos deportivos. La Presidenta, con los antecedentes a la vista, resolverá lo que es mejor para Chile y sus deportistas", reconoce el ministro Pablo Squella.

Eso sí, una candidatura de esta magnitud implica otras variables, que también han sido analizadas en otros ministerios, como el de Hacienda y Vivienda.

Un tema que complica es el déficit fiscal para los próximos tres años, lo que significaría reasignaciones o el eventual recorte de algunos programas, razones que habrían generado cierto recelo en el ministro Rodrigo Valdés. Asimismo, cualquier decisión que se tome involucrará al próximo gobierno, el que deberá ejecutar las obras de la Villa Panamericana y de los recintos que se necesiten para la cita.

"Organizar un Panamericano es ingresar a las ligas mayores del deporte olímpico. En ese contexto, la postulación no puede ser analizada sólo desde el punto de vista deportivo. Hay otros factores y por eso es que la decisión recae en la Presidenta de la República, que dispone de los antecedentes para resolver mejor", explica Squella.

Tomando en cuenta la situación económica del país, el informe presentado a Bachelet propone una inversión mucho menor que la realizará Lima para los Juegos de 2019. Si Perú invertirá US$ 1.500 millones en la cita, la idea del gobierno es gastar menos de un tercio de esa cantidad.

En caso de que Santiago decida postular, puede encontrar un ventajoso escenario pues, a pesar de algunas especulaciones, todavía ninguna ciudad ha mostrado un interés formal.

Cartagena de Indias y Bogotá asomaban, pero no habrá postulación. "Se pensó en Bogotá, pero no hubo interés y es casi seguro que no nos presentemos, por los costos", dice Alberto Galvis, vocero del Comité Olímpico Colombiano.

San Juan de Puerto Rico amagó con presentarse, pero la isla atraviesa por un duro momento económico. Así, la postulación dejó de ser una prioridad.

En tanto, el Comité Olímpico Argentino aún no se pronuncia sobre la candidatura de Buenos Aires, sede de los Juegos Olímpicos de la Juventud 2018, mientras que Brasil está en un período de descanso tras organizar el Mundial de Fútbol y los JJ.OO. de Río. En las últimas horas asomó Venezuela, pero lo cierto es que ni siquiera han definido la ciudad ni el plan de trabajo.

La pista se le abre a Santiago. Eso sí, el ministro prefiere bajarle el perfil a esta posibilidad: "De momento no es tema la opción que no haya otros países dispuestos a asumir el desafío que involucra un evento de esta naturaleza".