Jorge Luna es una de las figuras de Santiago Wanderers. El rendimiento del volante argentino no sólo ha contribuido a que los porteños estén a tres puntos del líder, Universidad de Chile, sino que también ha despertado interés en los clubes grandes.

En Valparaíso afirman que no han recibido propuestas por el mediocampista, aunque consideran natural que genere atención antes del período de transferencias.

La dirigencia caturra pretende adelantarse. Tienen decidido no transferir al volante, al que recibieron en préstamo desde Estudiantes de La Plata. La cesión expira en junio de 2015. Hasta esa fecha, pueden ejercer la opción de compra por la mitad de su pase.

"Podemos adquirir la mitad de la carta. Estamos decididos a ejercer la opción", explica Roberto Carrasco, presidente de la Comisión Fútbol wanderina. El monto ya está establecido: US$ 1 millón.

En la Quinta Región pretenden dar ese paso antes de cumplir un viejo anhelo: el retorno de David Pizarro, quien termina contrato ese mismo mes con Fiorentina y no seguirá en el equipo italiano. "Es un sueño juntar a Luna con David. Nos encantaría que viniera. Si él quiere y nosotros podemos, sería muy bueno", sostiene Carrasco.

Paralelamente, el equipo que dirige Emiliano Astorga se prepara para recibir a Ñublense. Los verdes no tienen bajas. El estratega definirá hoy la formación.

Mientras, crece el interés de los aficionados por asistir al encuentro frente a la escuadra de Ivo Basay. Hasta ayer se habían vendido casi seis mil entradas, una cifra que supera la tendencia previa al choque ante O'Higgins. Wanderers dispuso 18 mil localidades, el máximo aforo permitido del estadio Elías Figueroa. La venta continuará hoy en el recinto y a través de internet. Se informó que mañana no habrá boletos disponibles en el recinto, por razones de seguridad.