Cuatro días después de anunciar que renuncia como gobernadora de Alaska, la ex candidata a la vicepresidencia de Estados Unidos Sarah Palin dijo que no es de las que se rinden, sino una luchadora, pero agregó: "hablando políticamente, si me muero, me muero.
La política concedió entrevistas grabadas a las cadenas televisivas ABC, NBC y CNN, que fueron transmitidas hoy.
"Todas las alternativas están sobre la mesa" para su futuro, dijo a CNN.
Sin embargo, reconoció en el programa "Good Morning America", un programa matutino de gran audiencia de la ABC, que tal vez no podrá permanecer en el candelero tras su imprevista renuncia anunciada el viernes. Se esperaba que Palin intentaría elevar su presencia nacional ante la posibilidad de postularse para la candidatura presidencial republicana de 2012.
"Lo he dicho antes... usted sabe, hablando políticamente, si me muero, me muero. Así sea", repitió.
Calzada con altas botas de pesca en la población de Dillingham, Palin dijo que la necesidad de defenderse de demandas frívolas ha paralizado su gobierno.
"No seguiré el camino cómodo. Seguiré el camino recto por el bien del estado", dijo con respecto a su renuncia, que caracterizó como un avance no convencional.
"Sorprendió a la gente... Es atípico y anticonvencional. Así somos los de Alaska y por cierto así soy como funcionaria pública", agregó.
Palin dijo que no cree necesitar un título para efectuar "cambios positivos", pero añadió que no concibe abandonar totalmente la función pública.
La ex candidata a vicepresidente se presenta cuatro días después de soltar la bomba de su anuncio, pero en un lugar muy alejado de la prensa nacional: en una aldea pesquera remota, 50 kilómetros al norte del Círculo Polar Artico.
Palin preveía firmar luego una ley para llevará agentes de seguridad a pequeñas poblaciones. El acto se realizaba en Kotzebue, una población de 3.000 habitantes situada en el extremo arenoso de una península.