Bosnia conmemora hoy el atentado de Sarajevo que sumió a Europa en la Primera Guerra Mundial hace un siglo, pero lo hace dividida, con opiniones contrarias entre serbios y musulmanes sobre el autor del asesinato del archiduque Francisco Fernando de Austria.

Sarajevo conmemorará el centenario con un concierto por la noche de la  orquesta filarmónica de Viena, entonces capital del imperio austrohúngaro que  el joven nacionalista serbobosnio Gavrilo Princip truncó asesinando al heredero y a su esposa Sofía el 28 de junio de 1914.

Este será el comienzo de una serie de manifestaciones culturales y deportivas financiadas en gran parte por la Unión Europea, aunque sus dirigentes no asistirán.

Por su parte, los dirigentes serbios de Bosnia y de Serbia acudirán a Visegrad, en el este de Bosnia, para rendir homenaje a Gavrilo Princip, a quien  consideran un "héroe".

Desde el anuncio hace dos años de las conmemoraciones europeas en Sarajevo, ciudad de mayoría musulmana, los serbios rechazaron participar en estas  ceremonias, al denunciar un enfoque "revisionista" de la historia que califica a Princip de "terrorista" y responsabiliza a los serbios de la guerra.

HOMENAJE A PRINCIP EN LA CIUDAD DE KUSTURICA

Cientos de personas recordaban a Princip el sábado por la mañana en Andricgrad, la ciudad neomedieval que el cineasta serbio Emir Kusturica hizo construir en el corazón de Visegrad en homenaje al premio Nobel de Literatura, el yugoslavo Ivo Andric.

"Hemos venido a rendir homenaje a una figura capital de la historia del siglo pasado, Gavrilo Princip. Las divisiones son lamentables, pero es mucho  más lamentable intentar modificar los hechos", dijo Ljubisa Simonovic, de 58 años, quien acudió desde Serbia para asistir a las festividades apadrinadas por  el presidente de la entidad serbia de Bosnia, Milorad Dodik.

La "calle" principal de Andricgrad está bautizada como Mlada Bosna (Joven Bosnia), el nombre de la organización que promovió el atentado contra Francisco  Fernando y donde predomina un gran mosaico que representa a tamaño real a los  autores del ataque, con Gavrilo Princip a la cabeza.

FALSIFICAR LA HISTORIA

"Mi motivación personal (para organizar las ceremonias en Andricgrad) es oponerme a las tentativas provenientes de Europa occidental de falsificar la  historia, al querer presentar el asesinato de un tirano como un acto terrorista", declaró Kusturica recientemente.

Joseph Zimet, director de la misión del centenario francés encargado de las conmemoraciones, lamenta la ausencia de los dirigentes serbios en Sarajevo.

"El proyecto, que se lleva a cabo en Sarajevo, no cuestiona ni Serbia, ni la República Srpska. No se trata de un referéndum sobre Gavrilo Princip", aseguró.

En Sarajevo, donde el recuerdo de Princip se asocia a las fuerzas serbias que asediaron la ciudad durante la guerra de 1992-95, que causó casi 100.000 muertos, la población se muestra indiferente.

"Algo que ha sucedido hace un siglo no me emociona para nada. Las disputas sin sentido para decir que es terrorista o héroe me repugnan", comentó Nermina  Pobric, un ama de casa de 36 años.

Gospa Petrovic, de 68 años, residente en la parte serbia de Sarajevo, considera que "Gavrilo Princip es un héroe del pueblo serbio". "Mientras  vivamos, nos acordaremos de quien dio su vida por su pueblo. No hay mártir más  grande que él", dijo Petrovic.

Hace cien años, cinco semanas después del atentado, arrastradas por sus rivalidades, sus miedos, sus alianzas y la obcecación de sus dirigentes, las  grandes potencias europeas entraban en guerra.

Esta guerra dejó una Europa exangüe: 10 millones de muertos y 20 millones de heridos sólo entre los combatientes y millones de civiles muertos en  combates.