El ex Presidente de Francia, Nicolas Sarkozy se encuentra en el palacio de justicia de Burdeos respondiendo por un eventual financiamiento ilegal de su campaña presidencial de 2007, en el marco del caso "Bettencourt", en referencia a la heredera del gigante mundial de la cosmética L'Oréal, de 90 años.
Sarkozy podría ser inculpado por "abuso de debilidad" al tratar supuestamente aprovecharse de los problemas de la octogenaria multimillonaria para sacarle dinero.
Al término del interrogatorio, que se espera que dure varias horas, el ex jefe del Estado puede ser imputado o beneficiarse del estatuto más benévolo de testigo asistido.
Se trata del segundo presidente francés que comparece ante la justicia tras abandonar el Elíseo, después de Jacques Chirac, que en diciembre del año pasado fue condenado a dos años de cárcel exentos de cumplimiento por un caso de corrupción y financiación ilícita de partidos.
El exministro del Interior Claude Guéant, una persona muy próxima a Sarkozy, cuestionó la necesidad del interrogatorio al expresidente y se mostró convencido de que no hubo financiación ilegal de la campaña.
"Excluyo esa hipótesis", aseguró a la radio "RTL" Guéant, durante años brazo derecho de Sarkozy en el Elíseo, citó Efe.