El expresidente de Francia Nicolas Sarzkoy y su esposa, la ex modelo y cantante Carla Bruni, anunciaron hoy que pondrán una denuncia por la difusión de varias grabaciones privadas que realizó un consejero de comunicación cuando ejercían de jefe del Estado y de primera dama.

Sarkozy y Bruni "no pueden aceptar que declaraciones hechas a título privado hayan sido grabadas y difundidas sin su consentimiento", indicaron sus abogados en un comunicado publicado por la Agencia France Presse (AFP).

Según los letrados de la ex pareja presidencial, Thierry Herzog y Richard Malka, la "protección del secreto de las conversaciones privadas constituye uno de los fundamentos de una sociedad democrática".

El anuncio de la denuncia ante los tribunales se produce un día después de que el semanario satírico "Le canard enchaîné" y la web "Atlantico" publicaron extractos de cinco conversaciones grabadas en 2011 por el asesor de comunicación se Sarkozy, Patrick Buisson.

Se trata de grabaciones de conversaciones entre Sarkozy y su esposa, en las que bromean sobre dinero y patrimonio, y del presidente y sus colaboradores que opinan sobre algunos ministros o sobre la prensa.

Las cintas han provocado un gran revuelo en Francia, donde el primer ministro, el socialista Jean-Marc Ayrault, animó a Sarkozy a presentar una denuncia.

Buisson es un antiguo periodista ultraconservador considerado un gurú de la comunicación y al que se le atribuye la "derechización" de Sarkozy durante su infructuosa campaña de reelección presidencial. Reconoce ser el autor de las grabaciones, pero no de su difusión.

Grabó esas conversaciones como método de trabajo, para evitar tomar notas y nunca las borró, pero han terminado en la prensa porque fueron robadas, dice.

El letrado Guilles-William Goldnadel anunció en el canal "BFM TV" que el experto en comunicación presentará una denuncia por robo para aclarar "quién está detrás de todo esto".

No obstante, algunos allegados al político conservador señalaron que no eran conscientes de que las conversaciones se estuvieran grabando, como Claude Guéant, quien fuera secretario general del Palacio del Elíseo y luego ministro del Interior durante la presidencia de Sarkozy (2007-2012).

"Para mí es una gran sorpresa. No me esperaba algo así. Se trata de un procedimiento incomprensible e inaceptable. Nunca oí hablar de grabaciones oficiales ni vi una grabadora sobre la mesa", declaró Guéant.

Sobre Buisson pesa ya una investigación judicial sobre los sondeos que le encargó el Elíseo durante el mandato de Sarkozy por nueve millones de euros.