La Policía Metropolitana de Londres (Met) informó hoy de que no hay una "prueba creíble" sobre la participación de las fuerzas especiales de elite británicas SAS en la muerte de Diana de Gales y su amigo Dodi Al Fayed en 1997.
La Met había recibido el pasado mes de agosto nueva información sobre el accidente de tráfico en el que Diana de Gales, exesposa del príncipe Carlos, y Al Fayed perdieron la vida en París.
Según informaron entonces los medios británicos, el nuevo material indicaba una posible participación de las SAS y habría sido facilitado por una fuente militar.
En un comunicado, Scotland Yard señaló hoy que su conclusión fue tomada tras interrogar a varias personas, cuyas identidades no facilitó, y de revisar los archivos relacionados con el caso. Es por esto que no reabrirá la investigación.
"Toda línea de investigación razonable fue seguida de manera objetiva a fin de evaluar cualquier posible evidencia", señaló la nota, en la que puntualiza que no hay prueba fidedigna que pueda fundamentar la teoría sobre una participación de las SAS.
Cuando el asunto parecía cerrado, el pasado 17 de agosto la policía británica emitió un comunicado en el que informaba de que evaluaría la "relevancia y credibilidad" de datos nuevos recibidos acerca de la muerte de lady Di, exesposa de Carlos de Inglaterra y madre de los príncipes Guillermo y Enrique.
Sin detallar la procedencia de los datos, Scotland Yard dijo entonces que intentaría determinar el alcance de esa información.
La princesa de Gales murió junto a Al Fayed en un accidente de tráfico en un túnel de París mientras era perseguida por fotógrafos.
En diciembre de 2006, un informe policial llegó a la conclusión de que no existían pruebas que apuntaran a la posibilidad del asesinato, a la misma que llegaron los investigadores franceses.
Otra pesquisa judicial abierta en Londres en 2007 responsabilizó de lo ocurrido al estado de embriaguez del conductor, Henri Paul, y también culpó a los fotógrafos.