Como una nueva forma de atacar a quienes comparten contenido protegido por derechos de auto, Reino Unido ha logrado que tanto Google como Microsoft (Bing) firmen un acuerdo en el que ambos buscadores eliminen de las primeras páginas de sus resultados de búsqueda páginas que compartan contenido pirata, como sitios para ver series y películas online o para descargarlos a través de torrents.

Si bien sitios para ver contenido legal como Netflix, Amazon Video o Spotify se han vuelto cada vez más populares y Google ya haya eliminado más de 900 millones de enlaces con contenido pirata en 2016, aún no es suficiente para una industria que no encuentra la fórmula para el público se motive a consumir su contenido de forma legal y, sobre todo, pagando por él.

El acuerdo que firmaron Google y Microsoft con Reino Unido no es una normativa legal, sino que un acuerdo voluntario, solo afecta a quienes hagan búsquedas desde este país. No implica que los sitios serán dados de baja, sino que simplemente no aparecerán en las primeras páginas de resultados y restringirá la sugerencia de palabras claves que realiza el buscador de forma automática.

Las páginas afectadas serán aquellas que ya hayan sido marcadas como infractoras al derecho de autor previamente.