No había pasado un día de consumada la derrota de Eduardo Frei ante Sebastián Piñera cuando surgieron las primeras voces críticas del rol del gobierno de Michelle Bachelet en la campaña. El escenario del reproche fue la reservada reunión que sostuvieron los timoneles concertacionistas en la mañana del lunes, donde el presidente del PRSD, Fernando Meza, cuestionó la distancia que tomó La Moneda de la campaña presidencial.

Ayer, el diputado radical salió a refrendar su postura. "¿Cómo es posible que una Presidenta con más del 80 por ciento de valoración positiva de la ciudadanía, no haya sido capaz de capturar esa simpatía para el candidato?", sentenció en radio Agricultura. "No conozco un país en el mundo donde el jefe o jefa de gobierno deje a la deriva el conglomerado que la llevó al gobierno", añadió.

El planteamiento de Meza coincide con el análisis que hizo ayer el diputado DC Jorge Burgos en La Tercera. "Suena raro que el gobierno mejor evaluado de la Concertación, al final de sus días, le entregue el poder a la Alianza", sostuvo el parlamentario, quien cree que el origen del problema es "una forma de gobernar con ritos y costumbres que en la práctica provocaron que se desestimara el rol de los partidos".

DEBATE EN LOS PARTIDOS
En la DC el tema que se viene debatiendo desde hace meses. Por eso, un miembro de la mesa directiva de la falange señaló que propondrá un debate particular sobre el asunto en la consejo nacional ampliado que se reunirá el próximo sábado en Santiago.

Los cuestionamientos al papel jugado por La Moneda se dan momentos en que los partidos oficialistas atraviesan un duro momento a raíz de los "ajustes de cuentas" que han comenzado a aparecer al interior de la DC y el PS. Mientras los timoneles de esos partidos han evitado asumir responsabilidades  en la derrota, se ha evaluado que el conglomerado en su conjunto asuma las culpas del fracaso.

En ese contexto, el rol jugado por Bachelet en la campaña también fue objeto de debate en la comisión política del PPD que se reunió en la noche del lunes. Ahí, se hizo un análisis de las causas de la derrota y se planteó que todos los actores oficialistas -incluido el Ejecutivo- debía hacer un mea culpa respecto a los errores cometidos.

Los primeros cuestionamientos hacia la Presidenta provocaron una rápida reacción en La Moneda. Mientras el ministro del Interior Edmundo Pérez Yoma aseguró que en el Ejecutivo no hay ninguna autocrítica que hacer por el resultado del domingo, la vocera Pilar Armanet restó importancia a los análisis oficialistas. "Nosotros estamos ocupados gobernando hasta el último día y obviamente no tenemos tiempo ni estamos en condición de hacer comentarios, eso lo haremos a partir del 11 de marzo", sentenció.