La Playa de El Tabo, Quinta Región. La cámara apunta su objetivo sobre los miles de veraneantes que anualmente se reúnen a disfrutar del sol y las olas en aquel balneario del litoral central. En medio del gentío, un sujeto de casaca roja y gafas oscuras, con el pelo seco trenzado en rastas, se pasea por la arena silbando una melodía de Michael Jackson. Es el salvavidas y, aparentemente, da señales de no haberse sumergido en el agua hace tiempo. Sin embargo, a pesar de su inactividad acuática, se pasa el día adoctrinando a los visitantes del balneario acerca de cuál es la norma para bañarse.

Mauricio, el rescatista recién descrito, es el protagonista del documental El salvavidas, registro por el que la realizadora Maite Alberdi (29) consiguió el premio del público en el Festival de Cine de Valdivia 2011, y que se estrena en salas comerciales el próximo 17 de enero. Un personaje que busca prevenir antes que curar y que, cruzado de brazos y con expresión desafiante, apela a la moral y las buenas costumbres para mantener cierto grado de urbanidad en la orilla que vigila desde la distancia. "La idea era observar el sinsentido del trabajo del salvavidas mostrando esta figura del 'paco' en la playa, pero de apariencia medio hippie, en un lugar donde la gente quiere olvidar que tiene que cumplir ciertos mandatos. El Tabo es una de las playas más peligrosas de Chile, entonces se producía este choque entre el personaje y su ambiente", explica la directora.

Mauricio tiene una tesis: "Un salvavidas que se mete mucho al agua, no es un buen salvavidas", dice. Para él lo central es prevenir. El problema es que nadie lo toma muy en serio, ni los veraneantes ni el otro rescatista, Jean Pierre, que es todo lo opuesto: desordenado, empático y que no duda en meterse a las olas.

Tragicomedia documental, la cinta hace un formidable retrato de la topografía humana de los veraneantes, desde los vendedores ambulantes hasta los amigos pichangueros.

La cinta fue seleccionada en el Festival de Documentales de Amsterdam (Idfa), donde Alberdi lograría otro reconocimiento, con su nuevo proyecto: La once.

60 años de amistad
En la sección Forum del Idfa, la realizadora expuso un avance de La once. Fue considerada la mejor presentación de las 15 que participaron. Gracias a ello, el programa ITVS, quien financia y distribuye documentales en la TV pública de EEUU, cofinanció la cinta para ser exhibida en la cadena PBS (Public Broadcasting System), el canal estatal del país.

La historia sigue a un grupo de amigas, salidas del mismo colegio, que se junta a tomar té una vez al mes desde hace 60 años. Todo transcurre dentro de cuatro paredes, donde ocho mujeres -una de ellas, abuela de la realizadora- conversan en torno a una mesa, desde la nostalgia escolar hasta los escándalos sexuales en la Iglesia. "La película se mete en un mundo de intimidad femenina intensa. Muestra una nueva vejez, mujeres que están súper activas, que se preocupan de verse bien, que no quieren hablar de enfermedades. La idea era plantear una nueva mirada sobre esa edad y sobre Chile", detalla Alberdi.

En proceso de edición, La once se estrenaría a fines de 2013. A partir de marzo, el documental comenzará con una campaña viral a través de las redes sociales, y ese mismo mes, la directora comenzará a producir un nuevo trabajo, acerca de un grupo de adultos con síndrome de Down que van a un colegio que se transformó en un taller laboral. Nuevamente una historia universal de proporciones mínimas. "Estoy en una búsqueda de temáticas profundas, pero que se acerquen al público. Me preocupa la historia, estar contando algo, porque la gente quiere eso, no quieren ver un perfil de personajes, para eso está el diario. Quieren ver un proceso, la transformación de algo. Uno va al cine para nutrirse, pero también para pasarlo bien. No puedo obviar eso", remata Alberdi.