Miembros potenciales del jurado contemplaron fijamente el lunes a Dzhokhar Tsarnaev, acusado de perpetrar el atentado en la Maratón de Boston, al comenzar la selección en uno de los casos de terrorismo más graves en Estados Unidos desde las bombas en Oklahoma City hace dos décadas.
Tsarnaev, acompañado por sus abogados, ocupó una mesa al frente de la sala del jurado. Vestido con buzo oscuro y pantalones color caqui, generalmente mantuvo la vista en el suelo, aunque en ocasiones miraba a los posibles jurados y al juez. También escarbaba en su barba rala.
Cuando el juez federal George O'Toole Jr. lo presentó y le pidió que se pusiera de pie, saludó al grupo con una inclinación de la cabeza.
Tsarnaev, de 21 años, está acusado de planificar y llevar a cabo el ataque con bombas que dejó tres muertos y más de 260 heridos cerca de la meta de la carrera el 15 de abril de 2013.
A lo largo de tres días, unas 1.200 personas -una cifra mayor que lo habitual- serán convocadas a la corte federal para someterse a interrogatorios. Finalmente quedará un jurado de 12 titulares y seis suplentes.
El juez dijo que las declaraciones de testigos comenzarán el 26 de enero y continuarán durante tres a cuatro meses.
O'Toole leyó rápidamente los 30 cargos contra Tsarnaev, que incluyen el uso de un arma de destrucción masiva. También se le acusa de matar a un policía de la universidad MIT cuando él y su hermano intentaban huir después del atentado.
El jurado deberá decidir su Tsarnaev es inocente o culpable y en este último caso, si la pena ha de ser prisión perpetua o muerte.
Decenas de agentes estaban apostados dentro y fuera de la sala. Una víctima, Karen Brassard, esperaba fuera de la sala para observar la elección del jurado.
Los convocados respondieron por escrito largos cuestionarios destinados a excluir a personas con posibles conflictos de interés. Más adelante, los fiscales, abogados defensores y el juez los interrogarán individualmente.