El arponero "Yushin Maru 3" estuvo 30 minutos en el interior de la reserva en la que entró mientras perseguía al buque ecologista "Bob Barquer", al que hace una semana acosó durante 9 horas y causó daños en la proa, según denunció Sea Shepherd en un comunicado.
La organización considera que al entrar en aguas australianas el navío japonés incurrió en desacato a una orden de la Corte Federal australiana de 2008 que declaró las operaciones de los balleneros japoneses contrarias a la legislación federal del país.
Australia denunció a Japón ante la Corte Internacional de Justicia de La Haya, que debe pronunciarse sobre la legalidad de la caza de ballenas que, según los ecologistas, viola una moratoria a las capturas con fines comerciales pero que Tokio justifica por motivos científicos.
"Mientras los australianos esperamos ansiosamente una sentencia sobre el caso, incluso la más mínima presencia de estos balleneros en nuestras aguas es un insulto a nuestra nación entera", dijo el director ejecutivo de Sea Shepherd, Jeff Hansen.