El alemán Sebastian Vettel (Red Bull) afrontará su primera gran oportunidad para ser campeón en la temporada, ya que en el Gran Premio de Singapur tiene la primera opción real de lograr su segundo título mundial de Fórmula Uno.
En el caso de conseguirlo, Vettel desbancaría al español Fernando Alonso (Ferrari) como el piloto más joven de la historia de la competición en sumar dos títulos consecutivos.
Para que sea el día grande de Vettel, tienen que darse varias circunstancias y coincidir una victoria suya, que sería la novena en el presente certamen, con otros resultados de sus perseguidores en la clasificación de pilotos.
Así, para certificar el título, Vettel necesita que Alonso -a 112 puntos de distancia- no suba al podio y que tanto su compañero de equipo, el australiano Mark Webber, como el británico Jenson Button (McLaren Mercedes) -ambos a 117 puntos- no logren terminar en el segundo puesto.
Lo que es seguro fue su undécima pole de la temporada y, con el Mundial prácticamente en la mano, es probable que el joven piloto tenga en mente otro objetivo para este año: superar las catorce primeras posiciones en la parrilla de salida que logró el británico Nigel Mansell en 1992.
