Tras conocerse la detención de los chilenos Mónica Caballero y Francisco Solar en Barcelona, sospechosos de participar en el atentado a la basílica de Zaragoza y que además fueron absueltos del caso bombas, el Secretario de Estado de Seguridad de España Francisco Martínez, entregó a La Tercera detalles de la causa.

Respecto las pruebas que tiene la policía española, Martínez indicó que no puede dar mayor información debido a que la investigación está  bajo secreto de sumario y "el juez tiene que a partir de la prueba, sacar las conclusiones".

Sin embargo, adelantó que entre los elementos probatorios se encuentran que estas personas "se trasladaron en transporte público a Zaragoza con el explosivo, ingresaron al recinto y luego salieron".

El secretario de Estado explicó que "los cinco detenidos, según las investigaciones, pueden encuadrarse en organizaciones, grupos de carácter anarquista con grandes conexiones internacionales, conexiones internacionales que en este caso han puesto de manifiesto la relación entre el movimiento anarco insurreccionalista en España y en Chile".

"Para el desarrollo de esta operación, dirigida por el juez general de instrucción número 6 de la Audiencia Nacional, llevada a cabo por la Comisaría General de Información, ha sido absolutamente crucial la colaboración con la policía de investigación de la Jefatura Nacional de Inteligencia Policial de la República de Chile, poniendo de manifiesto una dinámica de colaboración internacional entre los servicios de lucha antiterrorista en España", agregó.

Martínez además indicó que "como consecuencia de estas detenciones se pone de manifiesto la estrecha implicación de estas dos personas en una red de ámbito internacional, y que no sólo tiene una clarísima implantación en Europa, que se llama el "Triángulo Negro Anarquista", España, Grecia e Italia, sino que también tiene una ramificación en el territorio iberoamericano, concretamente en Chile".

El secretario de Seguridad español, dijo además que "como consecuencia de la recogida de los diversos datos y evidencias que se encuentran en el lugar de los hechos, se hace una reconstrucción de aquellos hechos para llegar hasta los autores materiales".

Posteriormente, según sostuvo, las autoridades policiales "ven como estos autores materiales en esas pruebas aparecen como portadores del artefacto explosivo y se dirigen en transporte público a Zaragoza y ahí activan el artefacto explosivo causando graves daños en el interior de la Basílica, hiriendo a una persona y sobretodo pudiendo causar muchos más daños materiales y personales".

Por otra parte, Martínez señaló que "tanto el modus operandi como el tipo de artefacto tienen muchas similitudes con otro atentado que se produjo en España el pasado 7 de febrero en Madrid en la Catedral de la Almudena".

En esa oportunidad, se colocó una bomba similar, "en el interior de un confesionario que fue desactivada por especialistas del cuerpo nacional de policía", según dijo la autoridad española.

Por otra parte, indicó que hay que esperar el análisis de la documentación incautada a los detenidos para saber hasta "qué punto esta organización criminal estaba dispuesta a realizar nuevas acciones en un periodo cercano y cuál es el alcance de su capacidad delictiva y de alcance internacional"

"Por esto habrá que esperar que se produzca el desarrollo, durante los próximos días, de las investigaciones, bajo la tutela del juez que está dirigiendo la investigación", añadió.