Un trabajador colombiano y tres británicos, de la empresa holandesa Dietsmann, fueron secuestrados hoy mientras se dirigían a sus puestos de trabajo en la conflictiva zona del Delta del Níger.

"Esta mañana, en su camino desde Port Harcourt a la planta energética de Afam, un convoy que trasportaba a trabajadores nigerianos y extranjeros sufrió una emboscada por parte de un grupo de 30 ó 40 hombres armados", dijo a la agencia DPA la responsable de comunicaciones de Dietsmann, Marion Piekarec.

Los tres hombres estaban contratados por Dietsmann, pero realizaban trabajos para la petrolera Royal Dutch Shell en la complicada zona nigeriana, donde los trabajadores extranjeros suelen ser el objetivo de bandas criminales que buscar obtener el pago de rescates.

"Hubo un intercambio de disparos en el que murió uno de los encargados de garantizar la seguridad de los trabajadores tras el que se llevaron a los cuatro", agregó Piekarec.

Piekarec aseguró que no se ha contactado con los secuestradores, pero que la empresa está trabajando estrechamente con Shell Nigeria para estar preparados ante una eventual comunicación.

Respecto a la lamentosa situación, el canciller colombiano, Jaime Bermúdez, aseguró que su cartera ya inició contactos con sus representantes en África para ayudar en la liberación del colombiano y los británicos.

"Estamos en contacto con nuestra gente a ver qué información hay, estaremos muy pendientes para ver cómo podemos ayudar y colaborar para lograr la liberación", expresó el Bermúdez.

El canciller agregó que, aunque Colombia no tiene una sede diplomática en Nigeria, desde la embajada de Kenia están "muy pendientes" de la situación.

El secuestro, unido al sabotaje de un oleoducto de Chevron durante el fin de semana, podría amenazar la frágil paz alcanzada en la región el año pasado cuando miles de insurgentes abandonaron las armas tras una amnistía por parte del gobierno.

El principal grupo de rebeldes, el Movimiento para la Enmancipación del Delta del Niger (MEND), boicoteó durante tres años la producción de petróleo en el país africano en su lucha para conseguir que los beneficios se repartieran con los habitantes de la región. La producción cayó de 2,6 millones a 1,7 millones de barriles diarios.