Tras el bochorno que se vivió esta semana en la Cámara de Diputados luego de que la sesión de la Sala fracasara por falta de quórum, el controvertido episodio volvió a repetirse.
Al iniciar la sesión de este jueves pasadas las 10:30 de la mañana, sólo se encontraban 34 de los 120 diputados presentes en la Sala, considerando que el número necesario que se requieren para sesionar es de 39 legisladores (un tercio de los diputados en ejercicio que actualmente son 118 tras el desafuero de Rosauro Martínez y Gaspar Rivas).
Según ha trascendido, hasta las 10:25 horas la Sala estaba correctamente constituida y los legisladores habían dado el quórum necesario para sesionar. Sin embargo, una vez iniciada la sesión varios diputados se retiraron del hemiciclo por lo que la mesa debió suspender el debate y hacer un llamado a que retornaran.
Cabe destacar que, si bien el escenario es similar a lo ocurrido el martes pasado, la diferencia radica en que esta vez los diputados marcaron la asistencia requerida pero no se presentaron en la Sala -presumiblemente para asistir a las comisiones que se encontraban sesionando de manera paralela-, mientras que en la jornada del martes la sesión fracasó porque sólo firmaron su asistencia 36 diputados. Esto obligó a reprogramar la sesión para una hora después.
Con todo, el presidente de la Cámara, Osvaldo Andrade anunció ayer que -amparado en sus atribuciones como titular de la corporación- se establecerá una plataforma de control público de los horarios de ingreso de los parlamentarios lo que comenzará a regir el próximo lunes.