Aunque aún sólo es posible pronosticar lluvias en un plazo de tres meses, se espera que el trimestre febrero-abril se mantenga en rangos normales en el país, a excepción de Atacama y Coquimbo, donde no lloverá. "Si bien la gente tuvo la percepción de que el 2014 fue seco, en realidad fue normal dentro del déficit, y este año se espera que sea igual. Lo que pasa es que tantos años consecutivos de sequía no permiten revertir el efecto y la sequía se mantiene", explica explica Claudia Villarroel, climatóloga de la Dirección Meteorológica al analizar el último informe climatológico del país.
Es por este efecto que la sequía se acrecienta y ha sumado nuevos territorios al rango de sequedad extrema, que ya alcanza a la precordillera de la IV y V regiones, la costa de la VIII, la costa e interior de la IX Región, e incluso la mayor parte de la RM, como lo demuestra el monitoreo de los últimos 48 meses (ver infografía). Este es un punto relevante en la acumulación de recurso hídrico para el riego y el consumo humano, puntualiza Villarroel: "Ahí es donde se ve el efecto acumulado de temporadas de sequía durante los últimos años, y al parecer se va mantener así este año, porque no se ve un año completamente lluvioso".
Caso aparte es el de la IV Región, donde las lluvias no se presentarían, al menos, en el corto plazo. "Sabemos que nos vamos a enfrentar a un escenario crítico nuevamente, por eso estamos elaborando un plan estratégico para enfrentar la sequía en lo inmediato, pero también con obras a más largo plazo, y no se han escatimado recursos para la obtención de la bebida que es apremiante para la población", señaló Eduardo Fuentealba, delegado regional para recursos hídricos.
Para el ministro (S) de Agricultura, Claudio Ternicier, la situación ya no es tan auspiciosa como se planteó a principio de año, ya que el fenómeno de El Niño no ha logrado intensificarse: "A principios de enero se avizoraba mejor este año en cuanto a las lluvias en la zona centro sur, pero la verdad es que a esta fecha la evaluación es más pesimista porque hemos tenido un déficit de Valdivia hacia el norte, que llega a 100% en esa zona y a un 80% en Puerto Montt". Ternicier reconoce que la situación "es peor de lo que esperábamos, a pesar de que es mejor que años anteriores", y explica que para enfrentar la emergencia se han dispuesto todos los recursos y medidas. "El clima es muy dinámico, así que esperamos que en los próximo meses los pronósticos sean más favorables", agrega.
Mientras tanto, en el sur, los primeros meses de 2014 causaron estragos en las praderas. En Temuco debía llover al menos 38 mm, y no cayó una gota. Lo mismo ocurrió en Concepción y Valdivia, donde se esperaban 16 y 52 mm respectivamente, y en Osorno sólo cayeron 1,8 mm y no los 50 mm que le corresponden.
Eliott Solís es dueño del fundo lechero Piedras del Paillahue en Río Bueno (XIV Región), donde este verano tan seco afectó el alimento de sus animales. "El principal impacto ha sido la disminución en la producción de leche, porque el pasto se murió. No creo que haya un repunte en las praderas aunque llueva". El productor agrega que "en estos momentos estamos ordeñando 60 vacas en el predio. Antes nos daban 900 litros de leche diarios, ahora estamos entregando entre 550 y 600 litros".
En Galvarino, donde existe alerta roja por los incendios forestales, el agricultor Luis Sepúlveda cuenta que "se han secado muchas vertientes y si viene un invierno con pocas lluvias, menos se van a alcanzar a rellenar las napas".
Para su colega de Ercilla, Juan de Dios Fuente, en la localidad de Pidima, lo peor se dio en diciembre "porque hubo unos calores tan grandes que provocó que algunas siembra de trigo y avena se arrebataran como decimos acá".