Caster Semenya concentró gran parte de la atención en la jornada del Mundial de Atletismo de Daegu y avanzó sin problemas a las semifinales de los 800 metros.
La sudafricana fue portada en todo el mundo hace dos años en Berlín, cuando justo antes de ganar el título, se reveló que estaba siendo sometida a un test de verificación de sexo.
Con el pelo más largo que en 2009, la sudafricana, que nunca estuvo suspendida, pero pasó 11 meses sin competir mientras se definía su género, terminó hoy segunda de su serie con un tiempo de 2'01''01.
Después de su aplastante victoria en Berlín, Semenya no volvió a correr hasta julio de 2010. Desde entonces, no ha mostrado nunca la misma forma que hace dos años.
"Sólo estoy centrada en la próxima ronda", dijo brevemente la sudafricana, que tras la carrera quitó importancia a sus gestos de molestias en la rodilla. "Todo está bien".