El proyecto de ley de control de armas que debatirá el Senado el próximo mes incluirá una ampliación a nivel federal de la verificación de antecedentes para los compradores de éstas, destacó el jueves el líder de la mayoría demócrata Harry Reid en una victoria para los defensores de mayores restricciones.

El anuncio destaca la intención de los demócratas de tomar una postura más determinada en el esfuerzo de ampliar la verificación, que actualmente sólo se aplica a las transacciones que se hacen con vendedores de armas a quienes se ha otorgado una licencia federal.

El presidente Barack Obama y muchos defensores de que se controle el uso de armas, dentro y fuera del Congreso, consideran que una expansión del sistema a las ventas privadas de armas será la respuesta más efectiva de los legisladores a la matanza en una escuela primaria en Newtown, Connecticut en diciembre pasado. El sistema está diseñado para impedir que adquieran armas los delincuentes, la gente con graves problemas mentales y otras personas consideradas potencialmente peligrosas.

El debate general sobre el control de armas en el Senado incluirá asimismo un aumento en las condenas para el tráfico de armas ilegales y una modesta ampliación de un programa para seguridad escolar, destacó el senador Reid, de Nevada.

Reid destacó que durante el próximo receso de dos semanas del Congreso, espera que los senadores lleguen a un consenso bipartidista a fin de que se concrete la verificación de antecedentes de las personas que deseen comprar armas. Pero sin un acuerdo, destacó que la ley de control incluirá una versión más estricta aprobada este mes por la comisión jurídica del Senado, para ampliar el sistema a virtualmente todas las transacciones de armas privadas con pocas excepciones.

"Deseo aclarar: para que cualquier proyecto de ley que apruebe el Senado sea efectivo, debe incluir verificación de antecedentes", destacó Reid en una declaración escrita.

Los detractores, entre ellos la Asociación Nacional de Propietarios de Armas (NRA por sus siglas en inglés), afirman que la verificación de antecedentes puede ser evadida con facilidad por los delincuentes y que se corre el riesgo de que conlleve a la creación de un banco de datos de propietarios de armas, que la ley federal considera ilegal.

Si acaso no fuera incluida en la ley general de armas, una expansión del control de seguridad será planteada para que se agregue como enmienda. Pero en ese caso significará que necesitará el respaldo de 60 a 100 senadores para que pase, lo cual parece casi imposible de lograr por los demócratas.