El senador boliviano Eugenio Rojas, del partido del presidente Evo Morales, defendió la tortura en algunos casos "extremos", un día después de que la Organización de las Naciones Unidas (ONU) recomendara al gobierno y las fuerzas de seguridad erradicar ese crimen del país andino.
Rojas dijo a medios locales que "habría que permitir" la tortura para presionar a los "grandes criminales" en casos como asaltos y narcotráfico.
"La tortura puede ser aceptada. De alguna forma, puede estar esto para presionar, que informen mucho más. Si no, nunca van a hablar. Cuando no hay esta clase de presiones al que ha cometido un delito, no habla", agregó.
Las declaraciones se producen un día después de que la Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Navy Pillay, recomendase al gobierno boliviano "la adopción de medidas para erradicar el uso excesivo de la fuerza, la tortura y los tratos crueles".
El representante de la Alta Comisionada en Bolivia, Denis Racicot, señaló que hay "indicios de que la policía boliviana recurrió a un uso desproporcionado de la fuerza en algunos momentos de su trabajo".