El senador Carlos Cantero expuso que a raíz del deceso de dos trabajadores el día de ayer en una faena minera en Copiapó, "se debe dejar de hablar de seguridad e institucionalidad y abocarse a la estructuración de un cuerpo normativo que esté lo antes posible en funcionamiento para no seguir lamentando catástrofes dentro de una industria que le da mucho sustento económico a Chile, por lo cual ahora hay que cambiar las cosas".
"La ley no hace diferencia entre los tamaños de las faenas, ni el tipo de extracción que realiza, ni tampoco si es metálica o no, por ende se debe generar una ley que contemple dicha diversidad, pero que bajo ningún motivo vaya en desmedro de la seguridad de los trabajadores, ya que siempre se debe anteponer la vida humana por sobre cualquier otro interés", añadió.
El parlamentario explicó que según datos entregados por el ministerio de Minería, a través de un estudio efectuado por el Sernageomin, con el fallecimiento de los dos mineros ayer en Copiapó, que totalizó 37 muertes, la cifra superó el promedio que se había registrado en los últimos diez años de 34 casos, y se acerca preocupantemente al número más alto de la última década con 43 decesos en el año 2008.
Cantero también explicó que la preocupación por las normativas de seguridad vigentes debe enfocarse entre la II y IV Región, donde de los 37 fallecimientos que han ocurrido durante el 2010, 30 han sucedido entre esas regiones, a raíz de la cantidad de pequeñas y medianas faenas mineras que no se encuentran catastradas, por lo cual aseguró que "debemos realizar nuestro mayor esfuerzo por efectuar registros de las mineras y de las condiciones de trabajo en la cual de desempeñan los mineros".