Luego de que se inicie la actividad legislativa en el Congreso, el martes 3 de marzo próximo, los senadores de la DC presentarán un proyecto de ley que pretende despenalizar el aborto en caso de violación.
El texto, busca hacerle frente al del gobierno dado a conocer a fines de enero por la propia Presidenta Michelle Bachelet, ya que para los legisladores democratacristianos dicha iniciativa lo que hace es legalizar la interrupción del embarazo y no sólo quitarle el castigo penal.
La diferencia entre ambas figuras, explican en la DC, es significativa, ya que legalizar implica la promoción y, sobre todo, la validación del aborto en el caso de que la madre haya sido violada, y para los legisladores de la falange, en esta causal sólo corresponde despenalizar, es decir, evitar que la mujer vaya a la cárcel.
Por lo mismo, a mediados de enero, desde la DC le pidieron al gobierno presentar el proyecto, separando las tres causales para así evitar que el rechazo a una de ellas, pudiera hacer caer la iniciativa completa. También se pretendía evitar tensionar de manera un debate que ya es complejo debido a las distintas posturas que hay al respecto en la Nueva Mayoría.
De hecho, en cuanto se conocieron los primeros reparos de la DC en la materia, el presidente del PS, Osvaldo Andrade, emplazó a los falangistas a cuadrarse con el proyecto del gobierno, recordándoles que en el programa y la campaña de Bachelet se había hablado al respecto.
En donde sí están de acuerdo en legalizar el término del embarazo los parlamentarios DC, es en los casos de de inviabilidad del feto y de riesgo de la vida de la madre. De hecho, en 2011, los senadores DC Ignacio Walker, Andrés Zaldívar, Jorge Pizarro y Mariano Ruiz-Esquide presentaron una moción en esa línea.
"No se considerará aborto la acción destinada a salvar la vida de la madre, cuando existiere un riesgo demostrado para la misma, si a consecuencia de ello se produjere la interrupción del embarazo. Para proceder de esa forma se requerirá de un informe de dos especialistas registrado en la ficha clínica de la paciente", dice el mencionado texto.
Uno de los ejemplos que han tenido a la vista en la DC para abordar el tema es el del caso alemán, en donde, en, al menos, dos oportunidades -primero en 1975 y luego 1992- el Tribunal Constitucional de dicho país, se negó a legalizar el aborto por violación y sólo aceptó despenalizarlo.
La experiencia alemana también les ha servido a los DC para evaluar incorporar a su propio proyecto medidas tendientes a acompañar y asesorar a la mujer víctima de violencia sexual.
En esa línea es que los parlamentarios estudian sumar iniciativas que apunten a promover la adopción.
La idea es que se garantice que cuando una mujer llegue a un establecimiento de salud solicitando poner término a su embarazo, no sólo sea recibida por el personal médico, sino que también por un staff compuesto por asistentes sociales y psicólogos que a través de consejería la puedan convencer de que entregue su hijo a otra familia.
Para la redacción del nuevo proyecto, los parlamentarios falangistas han contado con la asesoría de los abogados Luis Ortiz y Alfredo Etcheberry, los que han concentrado su trabajo en precisar las condiciones de inimputabilidad de la mujer que aborta luego de un abuso sexual, en especial, para las menores de edad.