Falta de personal de trato directo, así como de servicios mínimos para el cuidado de los menores del Cread Galvarino, donde falleció en 2016 la menor Lissette Villa (11), fue lo que denunció la Asociación Nacional de Trabajadores del Sename (Antrase).

"Aquí debiera haber, por lo menos, 16 educadores por turno para que puedan atender eficazmente a nuestros niños, y en este minuto hay seis, y muchos de ellos trabajan por 24 horas por la falta de funcionarios", expuso Walter Arancibia, presidente de Antrase. Actualmente, el centro cuenta con 61 menores, de entre seis y 12 años.

El dirigente agregó que "hace dos semanas dijimos que quedaba una sola lavadora, y hoy  acaba de salir un furgón con la ropa de los niños para poder lavarla en otro centro".

Acusó que a la fecha no se han actualizado los protocolos de acción para la contención de los menores. "Desde marzo estamos esperando el reglamento que va a salir en caso de situaciones de crisis", indicó. Agregó que vienen "manifestaciones más fuertes" y que, además, "pondremos recursos de protección por estos niños y por los trabajadores".

Las denuncias fueron respondidas por la dirección metropolitana del Sename: "Se han invertido en el último año más de 720 millones de pesos para mejorar la calidad de vida de los niños y niñas que viven en el centro Galvarino", indicó la institución en un comunicado.