Nombres importantes del fútbol de Brasil, como Alexandre Pato, Zé Roberto, Luis Fabiano, e incluso Jorge Valdivia, ya son parte de "Bom Senso F.C.", que se podría traducir como "Sensatez Fútbol Club", un movimiento que pretende mejorar las condiciones laborales del medio, y que ya ha conseguido la adhesión de más de 800 futbolistas.

A nueve meses del inicio del Mundial, el ambiente sigue movido en Brasil tras las protestas que hicieron temblar a la Copa Confederaciones. Esta vez, una rebelión de jugadores de primera y segunda división se proponen dejar en jaque a la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF).

La iniciativa surgió en septiembre, luego de que la CBF anunciara un ajustado y exigente calendario de partidos, producto de la suspensión de 45 días que obliga la cita mundialista.

La noticia no cayó bien en los jugadores y su respuesta fue inmediata: Poco a poco se comenzaron a agrupar en masa en torno a "Sensatez Fútbol Club".

El grupo de irónico nombre elaboró un manifiesto que contempla con cinco reivindicaciones: Treinta días de vacaciones ininterrumpidas, pretemporada de entre cuatro y seis semanas, no más de siete partidos cada treinta días, implantación del "fair play financiero", y representación de jugadores, entrenadores y ejecutivos de los clubes en los consejos técnicos de las competiciones y las federaciones.

Entre las acciones de protesta que han firmado, destacan las que se realizaron ayer, en la jornada 34 del Brasileirao. En los siete partidos disputados, los equipos aparecieron con lienzos que interpelaban a las autoridades de la disciplina. Incluso, en enfrentamientos como el de Sao Paulo y Flamengo, los jugadores "pelotearon" en el inicio del partido, sin ninguna intención.

Las protestas comienzan a tener resonancia en los brasileños en el resto del mundo. Desde España, Neymar entregó su apoyo a la iniciativa: "Antes de salir de Santos, no se hablaba de este problema . Ayer me enteré de que los jugadores se manifestarán antes de los partido. Aunque creo que la solución se encontrará a través del diálogo, todo lo que se hace para mejorar el fútbol tiene mi apoyo", declaró.

En tanto, Willian, volante del Chelsea, también se refirió al tema. "Vi las protestas por internet. Creo que el diálogo es lo más importante. Estoy seguro de que esto se resolverá", señaló, algo esquivó.

No se descarta huelga

Una comisión del movimiento se reunió con la CBF para entregar sus demandas. En ella, los jugadores insinuaron que podrían irse a huelga en caso de que no ser escuchados, aunque todo indica que las exigencias serán atendidas, al menos las vinculadas a la cantidad de partidos, pretemporada y vacaciones.

"Nosotros dejamos la pelota en los pies de la CBF para que tome posición y nos muestre actitudes beneficiosas para el fútbol brasileño", sintetizó Paulo André, defensor del Corinthians, con respecto al accionar de un movimiento que vuelve agitar las tierras brasileñas en la antesala del Mundial.

Bom Senso F.C. (@BomSensoFC) cuenta con más de 800 adeptos y sigue sumando apoyo, tanto en otras divisiones del fútbol brasileño, como a través del mundo.