Representantes de la autoproclamada República Popular de Donetsk (RPD) se reunirán mañana, lunes, con militares ucranianos para impulsar el cumplimiento de los acuerdos de paz para el este de Ucrania, según informó hoy la oficina de prensa de la entidad separatista prorrusa.
"Las partes intentarán llegar un acuerdo sobre el cumplimiento de los acuerdos de Minsk, encontrar puntos de coincidencia y elaborar una postura consensuada", señala el comunicado.
La reunión está prevista para el mediodía local (09.00 GMT) y tendrá lugar en la Casa de Gobierno de la ciudad de Donetsk, la principal plaza fuerte de los separatistas prorrusos en el este de Ucrania.
El portavoz del Estado Mayor General de las Fuerzas Armadas de Ucrania, Vladislav Selezniov, confirmó que la reunión está programada y que se centrará en los problemas relativos al cumplimiento de los acuerdos.
"Sobre lo que allí se decida informarán los participantes en el proceso negociador al término de la reunión", dijo Selezniov, en declaraciones el canal de televisión 112.Ukraína.
Añadió que el próximo miércoles se celebrará una reunión similar con representantes de la autoproclamada república popular de Lugansk, la otra entidad separatista surgida en el este de Ucrania.
El miércoles pasado, el Grupo de Contacto para el arreglo del conflicto en el este de Ucrania, en el que participan representantes de Ucrania, Rusia, la OSCE y los separatistas prorrusos, celebró una reunión en la capital bielorrusa en la que se acordó un canje masivo de prisioneros, que tuvo lugar al día siguiente.
Estaba prevista la celebración de una segunda ronda de negociaciones este viernes, pero fue cancelada a última hora por desacuerdos sobre la agenda.
El intercambio de prisioneros ha sido el último avance, tras la tregua acordada el pasado 9 de diciembre, en el proceso de negociador para el arreglo pacífico al conflicto, que se ha cobrado cerca de 5.000 muertos y provocado el éxodo de cientos de miles de refugiados.
Sigue pendiente el cumplimiento de una serie de puntos del Memorándum de Minsk, sellado el 19 de septiembre pasado, como el repliegue del armamento pesado, la creación de una zona de seguridad de treinta kilómetros de profundidad y la apertura de corredores para cargas humanitarias.