Para mañana, la Nasa tiene programado el sobrevuelo de una aeronave equipada con un moderno radar por gran parte de la Región de Coquimbo. Se trata de la segunda experiencia científica que se desarrolla en la zona y está enfocada en medir la humedad en el suelo. Ahora también comenzará un nuevo estudio, que permitirá mejorar la gestión hídrica de los cultivos.

La misión Nasa-Uavsar (Uninhabited Aerial Vehicle Synthetic Aperture Radar) consiste en un sistema de radar que envía y recibe ondas de radio para obtener información acerca de las características de la superficie terrestre. Mientras el avión realiza el sobrevuelo, en tierra un equipo deberá levantar muestras de la zona. Para georreferenciar el paso de la aeronave se cuenta con el apoyo del Ejército, Armada y la PDI.

El comisario Cristián Aravena, jefe del Laboratorio de Criminalística de la PDI, señaló que "nosotros vamos a aportar nuestra experiencia científica. Vamos a marcar los puntos sobre los que pasará el avión con un GPS geodésico, que es muy preciso, lo que permitirá que la información de la Nasa se pueda comparar y tengamos una exactitud en el estudio del suelo".

En tanto, el jefe del Laboratorio Central de Análisis e Investigación Aplicada de la U. de La Serena, Héctor Maureira, explicó que "estamos trabajando con científicos de la Nasa para analizar la información que obtuvimos el año pasado. En esta nueva etapa se busca repetir la misma experiencia y obtener los mismos datos, pero aumentados a otros terrenos (...). En base a esta información se propondrá un modelo de gestión hídrica de un viñedo, pero aplicable a cualquier otro cultivo", explicó.

MODELO

Para ello se utilizarán, además de la información obtenida en terreno y desde la aeronave, imágenes captadas a través de satélites de la Nasa que están midiendo temperatura y humedad.

"Con esa información se contará con un modelo que permita decir cuál va a ser el comportamiento y en qué condiciones puedo yo manejar el comportamiento hídrico de mi cultivo", afirmó Maureira.

Para este sobrevuelo se escogieron predios de las viñas de Tamaya y Tabalí. Además, el avión de la Nasa sobrevolará el sector cordillerano para evaluar la humedad y campos de hielo en esa zona, que es la fuente de agua de la IV Región.