Un día de vigencia tiene la nueva ley de estacionamientos que, además de establecer dos modalidades de cobro -por minuto o por tramos-, obliga a las empresas a implementar una serie de medidas que generaron dudas entre los consumidores. Algunas de estas interrogantes van desde qué medidas de seguridad deben tomar las empresas para evitar robos en los vehículos, hasta qué necesita un cliente para eximirse de pago en un recinto hospitalario público o privado.
El director metropolitano del organismo, Juan Carlos Luengo, explicó que la normativa "establece la obligación (al proveedor) no sólo de la implementación de medidas de seguridad, sino que estas deben ser adecuadas y eficaces. Tú no puedes, para un recinto de cinco mil vehículos, disponer de dos cámaras y dos guardias en bicicletas. Las medidas tienen que ser proporcionales al recinto".
La autoridad agregó que la ley "prohíbe que existan carteles que digan que la empresa no responde ante este tipo de eventos". Sobre la información de cobro, Luengo añadió que "el derecho básico del consumidor es tener información veraz y oportuna. Es importante que exista una difusión de las tarifas en un lugar público y visible en el ingreso al estacionamiento y en la boleta".
La autoridad explicó que, en el caso de las atenciones de urgencia, donde se usó el estacionamiento y que están eximidas de pago, el usuario debe tener a la mano el comprobante de la atención, y que "en el caso de las personas que tienen dificultad permanente o transitoria de desplazamiento, esa circunstancia tiene que ser acreditada por el profesional a cargo del tratamiento o de la atención de salud".
Alza de precios
En un recorrido por el centro de Santiago realizado por La Tercera, se pudieron constatar algunas alzas de precios que se implementaron tras la entrada en vigencia de la ley. En el estacionamiento subterráneo de Plaza de Armas (perteneciente a SABA), la tarifa máxima por la jornada diurna costaba $ 9.100, este miércoles su valor máximo era de $ 12 mil.
"Si viniera todo el día, saldría perdiendo; ahora es más caro por día, pero como vengo solo un rato a hacer trámites, no veo la diferencia", señaló Camila Fernández. Además, la usuaria del estacionamiento destacó que "ahora no se cobra por la ficha extraviada, que antes costaba $ 15 mil".
Javiera Vargas, otra usuaria del servicio, aseguró que la normativa no la beneficia, porque "que cobren por minuto suena como que fuera más barato, pero al final sale más caro".
Otro de los estacionamientos del centro de la capital que tuvo que adaptarse a la nueva normativa es el Parking Agustinas, ubicado en Miraflores 235. Si antes el valor por tramo de media hora era de $ 1.000, con una tarifa diurna máxima de $ 10 mil, ahora ese tope es de $ 11.500.