Los funcionarios del servicio de urgencia del Hospital San José, en el sector norte de la capital, se encuentran en paro en reclamo por la sobredemenda de atenciones médicas. Aseguran que el servicio está colapsado.
La Fenats local, que agrupa a paramédicos, enfermeras y auxiliares del recinto, demandan una mayor cantidad de camas y que los pacientes sean distribuidos a otros recintos como medida paliativa. Hay personas que llevan nueve horas esperando en camillas una atención especializada.
Los trabajadores piden que se usen camas de pensionados para hospitalizar a los enfermos. Según consignó Radio Cooperativa la cantidad de pacientes que son atendidos en las camillas y que no pueden volver a sus casas superan las 45.
Esta situación se produce a una semana que naciera un bebé en el baño del recinto y que el ministro de Salud ofreciera disculpas públicas por las deficiencias del sistema.