El servicio secreto noruego PST tuvo en la mira al autor confeso del doble atentado de Oslo, Anders Behring Breivik, pero no lo investigó. Así lo reveló hoy la jefa del organismo Janne Kristiansen, a la cadena de televisión NRK.

El autor de la masacre, que dejó al menos 76 muertos, compró productos químicos a un comerciante polaco, por lo que ya figuraba en una lista especial. Sin embargo, no fue indicio suficiente para realizar una investigación más exhaustiva.

En el atentado en Oslo, Breivik utilizó una bomba de 500 kilogramos. Según confirmó la policía, el nacionalista había comprado en los últimos meses seis toneladas de abono químico, que había acumulado en el granero de su granja biológica.

Medios polacos afirmaron hoy que la fiscalía de Wroclav (Polonia) detuvo el  domingo a un suministrador de productos químicos de esa ciudad en relación con el doble atentado. Pero la fiscalía polaca desmintió posteriormente que hubiera efectuado una detención.

En el manifiesto de 1.500 páginas que Breivik subió en internet poco antes de los atentados, afirmaba que había adquirido productos químicos por internet para fabricar bombas.