La rusa Maria Sharapova, que alcanzó la tercera ronda del torneo de Madrid tras imponerse a la checa Klara Zakopalova, surgió como defensora de la cuestionada cancha azul del Masters 1000 de Madrid, cuestionada por jugadores como Novak Djokovic y Rafael Nadal.

"El color no tiene mucho que ver. La pista tiene buena pinta y se bonita. La vi por la tele y me gustó. Ahora que he jugado sí que he notado que es un poco distinta. Llegué hace poco de Stuttgart y si hubiera practicado más no lo habría notado tanto", explicó la jugadora rusa.

La número dos del mundo destacó que "el bote también es un poco diferente. El torneo está mejorando poco a poco. Sí es verdad que la pista resbala un poco. Tienes que trabajar un poco el bote y en los saltos, pero nada más", agregó Sharapova.