Paola Muñoz (31) vive el mejor momento de su carrera. Hace ocho días lo demostró en el Panamericano de Ciclismo, donde se quedó con la prueba de ruta, consiguiendo los pasajes al Mundial. Una actuación para festejar, aunque, por culpa de los numerosos dopajes que rodean alo ciclismo chileno, también para tomar con escepticismo. Ésa es precisamente la condición que pone la ciclista para mantener la entrevista, que no se le pregunte por sus compatriotas dopados, por las recientes palabras de los mismos o por qué de ella sí hay que fiarse en un pelotón tan contaminado. Lo exige indignada: "Éste es mi espacio".
¿Cómo valora su victoria?
Feliz, porque es histórico para Chile. Primera vez que una chilena gana medalla de oro en un Panamericano. Es muy potente y claramente mejor, porque me entregó un cupo al Mundial de Noruega. Sigo rompiendo paradigmas en un ciclismo que es machista más que feminista.
¿Se considera la mejor ciclista chilena de la historia?
No lo debo decir yo. Pero lo que sí sé es que estoy haciendo historia.
¿Sus éxitos servirán para impulsar el ciclismo femenino en Chile?
Claro que sí, creo que es una demostración con hechos de que se pueden hacer las cosas y que nos hemos ganado un espacio bastante amplio dentro del ciclismo chileno. Y con eso esperamos tener una Vuelta a Chile de mujeres, la estamos pidiendo a gritos. La necesitamos, porque la medalla de oro de una mujer pesa lo mismo que la del hombre.
En tiempos donde el dopaje es lacra del ciclismo chileno. ¿Se puede triunfar limpiamente?
El tema del dopaje es complejo. Se atribuye a una persona, pero si se suman en un deporte, terminan enlodando ese deporte. Creo que es responsabilidad de cada uno. No podría emitir comentario con respecto a la cantidad que hemos tenido en el ciclismo. Es un tema complejo.
¿Cuáles son sus expectativas para el resto de la temporada?
Voy a estar en tres copas europeas más, desde el 24 de mayo al 13 de junio. Y ahí ya vendría el esperado Giro de Italia, el 1 de julio. Estamos esperando, porque se sumaron más equipos italianos, lo cual nos dejó fuera de la lista de invitadas con invitación completa. Por lo que tendríamos que pagar los hoteles y esa suma de dinero es alrededor de 10 mil euros más, que el equipo no tenía considerado. Estamos medio complicadas con eso, pero con la esperanza de que vamos a poder juntar el dinero o que alguna empresa nos pueda ayudar para costear la hotelería a una de las citas más importantes del ciclismo mundial. Después vendrían unas carreras UCI en Francia, Panamericanos, el Mundial y el Madrid Challenge, que es de la Vuelta a España. Vamos a tener un año bien cargado, que terminará con los Juegos Bolivarianos en Colombia.
¿Les recomienda a los demás ciclistas partir al extranjero?
Para salir primero al extranjero hay que tener una madurez absoluta. Porque te encuentras con la realidad. Viajar a competir a Europa no es lo mismo que competir en América y ganar fácilmente o inclusive ganar en tu mismo país. Te pone los pies en la tierra, te aterriza bastante. Y es ahí donde tienes que tener la capacidad de darle lectura a los beneficios que puedas tener. En moverse en un pelotón de 170 corredoras y hasta 200, que es totalmente distinto a lo que corrimos en República Dominicana, que éramos 60. Es mucho más fácil. Entonces, hay que tener la madurez para soportar todo eso.
¿Cómo se pone fin a los problemas de organización del ciclismo?
Pasa con la mayoría de las federaciones eso de no tener gente a disposición de los cargos full time. Siempre es gente que deja parte de su tiempo para poder ayudarnos. Claramente no basta, ahí tendría que hacerse cargo el Ministerio del Deporte. Para que un montón de eventos país que se hagan pasen por ellos y no dependan de las federaciones. Así se pueden establecer distintas competencias que perduren y no pase que llegue otra federación que le tincó no hacer la Vuelta a Chile o quiso destinar los recursos para otra cosa. Así terminamos no teniendo vuelta y los ciclistas en el aire y perdiendo el profesionalismo. Porque es el único instante donde hay equipos empresas pagados y los ciclistas se pueden dedicar un poco más a esto.
¿Esperaba una actuación tan buena de Chile en el Panamericano? Mucho se habló de las ausencias.
Siempre hay gente que quiere estar en la selección y no puede. Claramente hay muchos que reclaman y tienen buena llegada en los medios. Pero el proceso fue bien claro para todos. Fueron tres fechas, más el campeonato nacional y se logró el término del selectivo con una selección casi completa. Los resultados están a la vista. Creo que las ausencias siempre van a ser ausencias, porque siempre tiene que quedar alguien afuera. Siempre hay cupos limitados. Y, en cuanto a mis resultados, se lo debo mucho al gran apoyo del Comité Olímpico, del Mindep, IND y al Plan Olímpico. Tuvimos buenos resultados. En un mes gané la Copa España, el Campeonato Nacional y el Panamericano. Me siguen apoyando, y claramente más resultados van a haber.
¿Qué sueños le faltan?
Hay tantos que me quedan por cumplir. Tengo el mejor resultado histórico para el país: un lugar 46 en el Campeonato Mundial de 2011 con profesionales. Claramente este año, como clasifiqué directo con la medalla de oro, me gustaría estar dentro de las 30. Ése es uno de mis sueños. Otro es tener medalla en Panamericanos, pero ahora mi sueño es el Mundial.