Mientras el funeral de Michael Jackson se convirtió en uno de los eventos mediáticos más importantes del mundo, el misterio sigue rodeando la muerte del artista.
El cadáver del cantante mostraba numerosos pinchazos en los brazos, lo que indica un abuso regular de medicamentos, informa hoy CNN, que tuvo acceso a fuentes de las investigaciones. Tampoco está claro dónde será enterrado finalmente el "rey del pop".
La ceremonia el martes en Los Angeles fue seguida en todo el mundo por varios cientos de millones de personas en la televisión, y en Internet hubo una auténtica avalancha.
El tráfico en la red fue un 33 por ciento más intenso que lo habitual, según afirma CNN en base a datos de la empresa de servicios online Akamai Technologies. Tan sólo en la web de CNN la transmisión en vivo fue solicitada 9,7 millones de veces, según la portavoz de la emisora Jennifer Martin.
Los medios estadounidenses calificaron la ceremonia en general como adecuada y digna, y el "New York Times" habló incluso de "funeral de Estado para una superestrella". En el exterior hubo algunas críticas a la "instrumentalización" de su hija Paris, de 11 años, tras sus palabras en medio de las lágrimas.
Rodeada de la familia, la niña se puso frente al micrófono en el Staples Center ante 20 mil personas y declaró entre sollozos: "Desde que nací mi papá fue el mejor padre que uno pueda imaginar. Sólo quería decir que lo quiero mucho".
El cuerpo de Jackson fue llevado a un lugar desconocido tras el funeral. Se desconoce cómo fue posible para la familia hacerlo en medio de la presencia de los medios y los helicópteros de la televisión.
El servicio de noticias online tmz.com señaló que no está prevista su sepultura en el cementerio donde la familia se reunió también el martes para una ceremonia privada. Jermaine, uno de los hermanos de Jackson, ha subrayado varias veces que le gustaría enterrar al cantante en su rancho "Neverland".
Hasta el momento no hay indicios sin embargo tampoco de que vaya a ser así.
Jackson murió el 25 de junio a los 50 años por un paro cardíaco, y las autoridades siguen investigando si su adicción a los medicamentos fue la causa.
Sus brazos estaban llenos de pinchazos y las venas destrozadas, señaló CNN en base a fuentes de la investigación. Pero por ahora no es seguro que la inyección de un narcótico haya parado su corazón.