Las tratativas internacionales para acordar una tregua en Gaza se han redoblado en las últimas horas, en medio de un aumento de la violencia, pues a la ofensiva israelí y al lanzamiento de cohetes desde la Franja se sumó hoy un atentado en Tel Aviv que puede malograr la negociación.
La secretaria de Estado de EEUU, Hillary Clinton; el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, y el presidente egipcio, Mohamed Morsi, mantienen intensas gestiones, apoyadas hoy por el Papa, para lograr una tregua que se resiste, pese a que ayer parecía inminente.
"Las conversaciones siguen adelante, no hemos abandonado la esperanza", declaró hoy Mark Reguev, vocero del primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, horas antes del ataque a un bus en Tel Aviv que dejó al menos 20 heridos, tres de ellos de gravedad.
El atentado, es el primero con bomba en un bus desde 2006 en la capital y también el primero contra el transporte público israelí desde marzo de 2011. En abril de 2006, un suicida palestino mató a 11 personas en la estación central de buses, mientras que en marzo de 2011, una bomba estalló en un paradero en Jerusalén, matando a una mujer e hiriendo a 50 personas.
El ataque de hoy se produjo cuando una o dos personas lanzaron material explosivo dentro de la máquina. "Habíamos valorado que además de la amenaza de cohetes, podía haber atentados en las grandes ciudades. Existe la motivación y la capacidad de hacerlo", dijo el jefe policial Yohanan Danino. Posteriormente la policía caratuló lo sucedido como "ataque terrorista" y no suicida. Versión que fue reiterada más tarde por Ofir Gendelman, vocero de la oficina del primer ministro.
De momento, ninguna facción armada palestina ha asumido la autoría del ataque en Tel Aviv, mientras el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, ha convocado a sus ocho principales ministros.
En Gaza, a través de los altavoces de una céntrica mezquita se informó de la explosión y una voz la calificó como "la respuesta natural a los crímenes contra nuestros niños", mientras decenas de milicianos expresaban su júbilo en las calles.
Desde que se inició la ofensiva israelí "Pilar Defensivo" en la Franja, que hoy cumple su octava jornada, han muerto casi 150 palestinos y más de un millar han resultado heridos, en tanto que han perdido la vida 5 israelíes y sufrido heridas alrededor de 40.
MEDIACION
Los mayores esfuerzos por alcanzar un alto el fuego fueron hoy protagonizados por Clinton y Ban, quienes se entrevistaron en Ramala (Cisjordania) con el presidente palestino, Mahmoud Abbas, antes de regresar a El Cairo para reunirse con Morsi.
"Se requiere de todo el mundo ahora que siga adelante con los esfuerzos para alcanzar el alto el fuego y el cese de hostilidades porque su impacto en la seguridad y estabilidad de la región impedirá más tragedias contra nuestro pueblo", afirmó Abbas, quien aseguró estar "en contacto" con todas las facciones palestinas.
La labores de mediación internacional recibieron hoy el apoyo de Benedicto XVI, quien además pidió a las autoridades palestinas e israelíes que adopten medidas "valientes" para alcanzar la paz. "El odio y la violencia no son las soluciones para resolver los problemas", dijo el Papa ante varios miles de personas que asistieron en el Aula Pablo VI del Vaticano a la audiencia pública.
Mientras, en la Franja, el Ejército israelí continúo con sus bombardeos sobre un centenar de objetivos, incluidos el Ministerio de Seguridad Interna de Hamas y un edificio que acoge oficinas de medios de comunicación internacionales.
Además, fueron objetivo del Ejército "cincuenta puntos de lanzamiento de cohetes, tres almacenes de armas, una fábrica de armas y un sistema de túneles utilizado para transportar combustible a Hamas, que luego se utiliza para apoyar actividades terroristas contra el Estado de Israel y sus ciudadanos".
Por su parte, las milicias palestinas lanzaron seis cohetes contra Israel, dos de los cuales fueron interceptados por el sistema antimisiles "Cúpula de Hierro". Se desconoce si los otros cuatro llegaron a impactar en territorio israelí.